Esta historia no es mía. La escribieron mi hermana y su amiga. Estos personajes no me pertenecen. Todos los derechos reservados. Esta es una historia que mezcla Tokyo ghoul con Assassination Classroom
Cuando llegó la noche, Daoko sigilosamente se puso una vestimenta negra y un gorro. Como todo estaba lleno de médicos, decidió que la mejor forma de escapar era por la ventana. - Allá vamos. - Dijo Daoko, un instante, salta por la ventana, pero, se da cuenta de que...
¡¡¡Estaba cayendo de un noveno piso!!!
Daoko cerró los ojos esperando estar muerta al minuto, pero casi dos minutos más tarde se dio cuenta de que ya no estaba cayendo. Algo la estaba agarrando, venia de su espalda. Cuando abrió los ojos vio que cuatro tentáculos largos y azules salían de su espalda para qu
hiciera daño. Daoko se dispuso a gritar, pero uno de los tentáculos la tapo la boca para que se callara.
Cuando Daoko se recuperó de aquel susto corrió a la biblioteca de Kaneki, aunque estaba cerrada, Kaneki la dejó entrar porque era la clienta que más solía venir todas las tardes después del colegio.
Cuando Daoko entró estaba exhausta y Kaneki la ofreció sentarse y un café. Cuando Daoko le conto que libro había venido a pedir, Kaneki se sorprendió mucho Ya que las palabras de aquella niña no sonaban tan dulces como las de otras veces, sonaron más bien frías y duras, e hicieron recordar a Kaneki su tiempo como ghoul, antes de que las pastillas anti-ghoul existieran.
Kaneki le dio a Daoko todos los libros sobre ghouls que tenía, algunos eran de información y otros eran comics y noticias de ghouls. Daoko le dio las gracias a Kaneki y se fue de la biblioteca.
Touka entró por la puerta que daba a la biblioteca desde su casa y le pregunto a Kaneki que quien había entrado a estas horas de la noche y que libros le había pedido. A lo que Kaneki respondió todavía con tono impactado -Ha sido Daoko, la chica de siempre y me ha pedido libros de ghouls-. Touka se sorprendió, ya que su marido guardaba los libros de ghouls en un cofre con llave y nadie sabía de su existencia y aunque
alguien supiera de ella nadie venía a pedir esos libros. Touka le dijo a Kaneki que había que espiar a esa chica porque detrás de su apariencia de adolescente normal había un espíritu ghoul, y eso fue lo que hicieron el mes siguiente.
Daoko hacía pocas cosas en su día a día. Se limitaba a ir de casa al colegio, (donde en el recreo solo investigaba sobre el libro de ghouls) del colegio a veces a la biblioteca y de la biblioteca a casa. Decidieron ir más lejos y espiarla en todas partes, pronto se dieron cuenta de dos cosas: Daoko comía poquísimo y lo poco que comía lo vomitaba y que había empezado a salir con un chico llamado Toshio.
Daoko comenzó a pasar más tiempo con él, por lo que al pasar lo que pasó al mes siguiente, ella fue la principal sospechosa. Un mes más tarde de que comenzaran a salir mientras que cenaban, en la televisión se notificó la desaparición de un chico llamado Toshio. Daoko se puso muy pálida dijo que ya no quería más y se marchó a su cuarto. Allí se pasó una semana sin ir a clase porque se supone que tenía anemia (que te sientes cansado y débil).
Un día mientras cenaban se notificó por la televisión que habían encontrado el cuerpo sin vida de Toshio había aparecido muerto en la puerta de su casa con un gran agujero en las entrañas y estas sacadas de su cuerpo, medio devoradas. Daoko no pudo escuchar más, se marchó a su cuarto desde donde pudo escuchar lo siguiente que dijo el investigador Takaoka: "El muchacho ha sido devorado por un ghoul."
Daoko sé quedó tan pálida que parecía un fantasma. Estaba tan triste que cuando su hermano, Hiro fue a molestarla, casi le arranca la cabeza.
Todas las noches Daoko iba al cementerio, no a hacer gamberradas, sino a visitar a Toshio. Día tras otro, Daoko comía cada vez menos, se volvía más agresiva e iba más a la biblioteca a visitar a Kaneki. Kaneki ya estaba preocupado, por lo que tomó una decisión. Decidió enseñar a Daoko a controlar su T.E.I (trastorno explosivo intermitente).
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Mientras entrenaban, en uno de los descansos Daoko le dijo a Kaneki que mientras escuchaba lo que decía Takaoka en una de sus investigaciones, se dio cuenta de que aquel hombre era hijo de Takaoka el profesor que intentó sin éxito matar a su padre y a sus compañeros y preocupada le dijo a Kaneki- Ken... ¿Crees que debería contarles a los niños de mi clase que algo está amenazando con matarlos? Daoko se quedó muy quieta y Ken sin darse cuenta de lo que hacía sin querer la pego un puñetazo. Al ayudarla a levantarse Daoko comenzó a llorar y a
llorar mientras que decía- No fue mi culpa que Toshio muriera, pero no quiero matar a mis compañeros de clase. Miro a Kaneki con tristeza y le dijo- Y lo más importante... Crees que debería decirles que soy una ghoul. Kaneki le dio una sabia respuesta- Solo cuéntaselo a tus amigos de confianza y no dejes que nadie más se entere. La miró con una cara entre apenada y sonriente y después dijo- Se acabó el entrenamiento Doko, espero que reflexiones sobre lo que te he dicho-. Y Kaneki dejó a Daoko sola, abrumada entre tanto pensamiento.
Daoko llegó al colegio, sin ganas y en el almuerzo, apenas comía. Koro-sensei notó que la pasaba algo. - Oye, Daoko, ¿Estas bien? Apenas has comido. - Daoko, para que no supieran que era un ghoul, usó esta excusa. - Es que ha fallecido un miembro de mi familia, profe. - Koro-sensei empezó a sospechar, porque, ya llevaba varios meses sin comer demasiado.
No quiero que el profe se entere de que soy un ghoul, por lo menos aún no...
Cuando llegó a casa, se sentía rara. No había echado la comida en el baño. Se empezó a sentir mareada y poco después de llegar a su cama, cayó desmayada al suelo, pero eso no es lo peor, se dio en la cabeza con el borde de la mesa. Cuando despertó, no estaba en su habitación, y, notaba más peso de lo normal en su cabeza. Cuando fue a tocarse, noto una venda... Estaba en el hospital.
¿Qué ha pasado, mamá? - le preguntó la joven a su madre, sentada en una butaca de cuero esperando a que Daoko despertara. Entró un médico y nada más pasar por la puerta de la habitación se puso a hablar
con Kayano. Por la cara que puso la madre, no era nada bueno. -Mamá, ¿qué pasa? - preguntó Daoko confusa. - Kayano miró al médico y empezó a hablar: - me tamo, cariño que al darte ese golpe no te pasó algo bueno. - ¿Pero que me pasó? - preguntó la pequeña - tienes... la enfermedad de Alzheimer. Es una enfermedad que te hace olvidar las cosas continuamente. - Dijo el médico. Daoko no se podía creer lo que oía. ¿Olvidaría a su familia? ¿Olvidaría que es un ghoul?
Cuando Daoko salió del hospital, se le ocurrió una genial idea: grabaría un video diciendo que es un ghoul y todas las cosas que se olvidarían para que cuando lo olvidara todo, viese ese vídeo.
