Young Heart [EN PAUSA]

03: FIESTA DE PIJAMAS

Eran las siete de la tarde y la mayoría de las personas ya se habían ido de la fiesta del pequeño Louis pues era noche buena.

Anne, Gemma y el ojiverde aún seguían en la casa de los Tomlinson. De hecho pasarían nochebuena con ellos, puesto que Des (el padre de Harry) viajó a un asunto de trabajo por la mañana.

—Que bien que decidiste pasar la noche con nosotros. — Le dijo Johannah a Anne.

—Somos amigas y nuestros hijos también, míralos se están divirtiendo como nunca. — Señaló a los pequeños que seguían jugando con el regalo que Harry le había dado al ojiazul, un balón de futbol.

—Pégale duro al balón boo, yo puedo detenerlo. — Pidió el rizado.

—Veamos si eres tan buen portero como dices. — El pequeño Louis dio tres pasos hacia atrás para tomar impulso y corrió para pegarle al balón. 

Harry trató de detenerlo pero el balón dio justo en su cara, logrando que comenzara a llorar. La madre del pequeño fue rápido a ver el porqué del llanto de su hijo y se percató que tenía la marca roja del balón en el rostro.

—Yo no fui. — Dijo el ojiazul alzando sus manos cuando Anne volteó a verlo.

—Eres un mentiroso. — Reprochó el rizado.

—Lo siento, fue sin querer queriendo.

—¡No quiero saber nada de ti, tonto!

—Hazzie, discúlpate con Louis. — Ordenó su madre.

—Pero mamá, el fue el que me pegó.

—Nada de peros, tu lo acabas de insultar.

Harry se acercó a su amigo especial y le pidió disculpas mientras refunfuñaba.

—Te perdono. — Louis se puso de puntitas y empezó a tallar en la parte donde le había pegado a su amigo. —Sana, sana colita de rana. Si no sanas hoy sanarás mañana.

El ojiverde sonrió aún con lágrimas en los ojos, para posteriormente alzar sus pequeños bracitos. El castaño sabía lo que eso significaba así que le dio un gran abrazo a Harry.

—Bien niños, vayan a cambiarse. — Pidió la madre del ojiazul.

Harry se acercó a Anne. —Pero yo no traje ropa mami.

—Yo te traje ropa mi pequeño, ve a cambiarte.

—¿Qué ropa me pongo mamá? — Le preguntó Louis a Johannah.

—La pijama de balones. Hoy tú y Harry tendrán una fiesta de pijamas.

—¡SI!— Festejó el pequeño.

+

Harry y Louis estaban en la habitación del mayor, ya habían comido junto con toda la familia y ahora solo estaban tratando de armar un rompecabezas. El menor vestía una pijama de dinosaurio que le había comprado su madre.