Akumu ⋮ 悪 夢

❝𝐄𝐬 𝐭𝐮 𝐜𝐮𝐥𝐩𝐚❞

La pequeña Akumu había llegado a casa.
Está vez tenía un moretón al rededor de su ojo izquierdo.

Por más de que ya estuviera acostumbrada, no podía evitar que sus ojos se cristalizar para luego dejar salir las lágrimas que había estado aguantando en en transcurso del día.

La persona que alguna vez considero su amiga, se burló de ella al verla ser golpeada por sus otros compañeros.

De todas formas, ¿que podría hacer ella?.

Era débil y tenía miedo de decirle a alguien sobre eso... miedo de que se burlaran de ella por no defenderse.

Lo único que podía hacer era: llorar en su cuarto, y esperar a que llegara el día siguiente y repetir la misma rutina de todos los días:
Levantarse, hacer su desayuno, ir a la escuela, ser golpeada sin razón alguna y volver a casa para llorar, escuchar los gritos de sus padres que llegaban tarde en la noche y tener esas horribles pesadillas que tanto terror le provocaban.

Se dirigió a la cocina para preparar la comida de sus padres como era de costumbre para luego dirigirse de nuevo a su habitación para dormir y así tal vez, no oír los gritos de sus padres.

Cerró con fuerza sus ojos y se preguntó a si misma:

ー ¿Podré llegar a ser feliz

Después de un rato logró dormir.

Lastimosamente su sueño no era nada más que otra de esas pesadillas.

En el sueño de Akumu, ella se encontraba en una habitación completamente oscura.
Luego de un tiempo una luz se encendió al frente de ella, era un libro.

La pequeña se acercó a paso lento a aquel libro y lo abrió.
Dentro de el encontró fotografías de ella y aquella "amiga" de cuando eran felices.
Lo peculiar de esas fotografías es que  estaba observando Akumu, era que empezaron a moverse y parecía que también empezarán a hablar.

Akumu, sorprendida oyó una en específico que llamó su atención.

ーAkumu, ¿te puedo hacer una pregunta?ー Cuestionó una pequeña niña de unos 10 años aproximadamente.

ーClaroー respondió la otra niña con el mismo tono de voz serio que siempre usaba.

ー¿Dónde está tu hermano?ー Esa pregunta hizo que la niña de cabellos azabache quedara de piedra, no sabía que responder a eso.

La pequeña solo se limitó a responder ーel ya... no está aquíー dijo eso y desvío la mirada.

En ese momento Akumu, que se encontraba oyendo lo que dijo cuando era pequeña, se asustó al oír como aquellas palabras se repetían y cada vez sonaban más fuerte.

Inmediatamente se tapó los oídos.

De repente a aquellas palabras se sumaron otras que decían "Fue tu culpa".

Por más de que se tapara los oídos seguía escuchando las voces que repetían esas palabras que tanto oía en casa.

La chica poco después comprendió que aquellas voces venían de su cabeza y que por eso no lograba callarlas, empezó a gritar tan fuerte que parecía que todo lo que había a su alrededor se había roto y ella se encontraba cayendo.

Se agarró fuertemente de sus piernas y cerro sus ojos hasta que sintió que llegó al suelo, abrió lentamente sus ojos.

Akumu yacía en el piso, su ropa estaba cubierta de sangre, pero nada le dolía, intentó levantarse y cuando finalmente lo logró se encontró con la mirada de superioridad de aquella chica que había dicho ser su amiga que empezó a reír.

Akumu comenzó a llorar, rogándole a la de hebras cafés que se callara.

Cuando ya no soportó más golpeó repetidas veces su Propia cabeza contra el suelo, cada vez aumentando más la fuerza de esos golpes.

Cuando iba a golpearse la cabeza con la fuerza suficiente como para que se rompiera despertó.

Apenas se despertó, tomo una bocanada de aire y se sentó en su cama. Estaba temblando y su respiración era irregular.

Cuando por fin consigo calmarse vio la hora en el reloj que había en su cómoda, se levantó y se alistó para ir a la escuela.

al salir de su habitación notó que en el sillón se encontraba su padre dormido y la televisión estás encendida.

Se dirigió a la cocina, preparó su desayuno, dejo ya hecho el de sus padres y luego salió de su hogar.

Y así empezaba otro día para Akumu.

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