ONE-SHOTS// MARVEL +18 🔞

#3. TONY STARK (Parte 2)

Se que no es necesario decirlo pero lo hago por si acaso. En esta historia tenéis que imaginar a Tony hablando de la forma irónica y sarcástica que lo la caracteriza, al igual que sus gestos.

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Pasé todo el domingo con una ansiedad terrible. ¿Por qué no habría hecho caso a los consejos de "nunca acostarse con tu jefe"?. Estaba dudando de si ir el lunes a trabajar o fingir que estaba enferma, pero si hacía eso seguro que Tony pensaría que para mí aquello había significado algo, y estaría en lo cierto.

Al final decidí ir ya que lo más seguro que Tony fingiría que no había pasado nada, como había hecho con otras empleada y demás amantes.

Al lunes siguiente entré en la Torre fingiendo que era un día normal, como cualquier otro, trabajaría, descansaría, volvería al trabajo y después para mi casa. Esperé a uno de los ascensores junto varios empleados y cuando las puertas se abrieron entré junto a la multitud.

Ya iban a cerrarse las puertas cuando Tony entró también y se me quedó cara de póker.

-Todos fuera, tenéis el día libre. - Les dijo a los que estaban allí. Yo intenté fugarme con el resto pero Tony me lo impidió. - No, no, tú no vas a ningún lado.

-Me aseguraste que lo pasase el sábado no repercutiría en mi trabajo. - Le dije cuando nos quedamos solos.

- Y no lo hará, el ascensor es zona neutral. - Dijo mientras pulsaba el botón de bloqueo. - ¿Por qué te fuiste el sábado? Ni siquiera te despediste.

-Tan sólo te ahorré la molestia de enviarme a casa, si no ibas a hacerlo esa noche lo harías al día siguiente, como pasó con el resto de empleadas que te tiraste. - Le dije a lo que el me miró fijamente.

-Ohhh ¿Eso crees?. Además no hables así a tu jefe.

-Tú mismo has dicho que esto es zona neutral, y sí, eso creo ya que ni siquiera me llevaste a tu habitación sino a tu picadero personal. - Le dije a lo que él hizo una mueca ante mi pillada.

-Está bien, no fue acertado llevarte a esa habitación, pero no fue como con el resto, de haber querido eso no habría esperado tanto tiempo para invitarte.

-Ya...

- Es cierto.

- Lo que usted diga señor Stark.

-Por favor, no me llames así. Déjame demostrarte que no es lo que piensas, el sábado vendrá el equipo a una fiesta, me gustaría que estuvieras.

-No.

-¿Le estás llevando la contraria a tu jefe?

-Zona neutral, recuerda.

Tony puso los ojos en blanco ante mi respuesta, sin duda lo estaba desesperando, pero si era verdad lo que decía una simple fiesta no iba a arreglarlo.

-Me va costar demostrarte que digo la verdad ¿No?.

-Así es.

-Bien, que tengas un buen día de trabajo, y de verdad que espero verte en la fiesta. - Me dijo desbloqueando el ascensor y saliendo de allí.

Yo mientras me maldecía a mí misma por haberme dejado llevar por lo que sentía en lugar de por mi razón, deseaba con toda mi alma que Tony dijera la verdad y que yo no fuera como el resto, pero temía que tan sólo quisiera repetir y después olvidar que pasó.

El día pasó sin novedad, al igual que la mañana del día siguiente, hasta que llegó un repartidor con el ramo de rosas más grande que había visto en mi vida y me lo entregó delante de todos mis compañeros.