Por alguna extraña razón a pesar de haber dormido bastante, me levanto con el cuello dolorido y es que al pretender alcanzar el cable del cargador para desenchufarlo... ZASCA. Pinchazo.
- AAAAh me cago en satán - suelto como alarido, el mismo con el que despierto a una adormilada Emma que parece no entender nada de lo que está pasando.
- Pero tía, que carajo te pasa, que casi me dejas sorda asquerosa - se queja mientras se quita las legañas como una niña pequeña
Perdón perdón, de verdad que me he levantado con el cuello como si alguien me tuviera de muñeca vudú y me hubiera traspasado el alfiler entero. - digo mientras me paso la mano por las cervicales.
- Osea... que hacer surf hoy... como que no.. ¿no? - dice mostrando una sonrisa burlona
Solo de imaginarme subida a una tabla de surf teniendo en cuenta que sería la primera vez en lanzarme a ello, y con mi pésimo equilibrio... iba a ser algo que me recordarían toda la vida, y ya sin dolor de cuello me costaba acceder, con el cuello partido como que ni de coña.
- ¿Pretendes que salgamos en las noticias? Ya lo estoy viendo, "joven española en Grecia tiene un trágico accidente en el mar, el cuerpo se lo comió alguna criatura todavía sin identificar"
Emma empieza a reírse como una hiena. Maldita sea. La verdad es que ha sonado a ida de olla.
- Sí claro, un megalodón ya de paso, como en la peli esa que sale mi Jason Statham. No te jode. - dice mientras me da con la almohada.
- Bueno, pero yo no voy. Me quedo en la hamaca, viendo como hacéis el ridículo de lejos. Así me echo unas risas. Y me pongo fina a martinis.
La mañana transcurre rápido, desayunamos todas menos Gabi... cosa que no paso por alto, ya que se me hace demasiado extraño. Me acerco a ella aprovechando que las demás van algo adelantadas a paso de elefante.
- Oye gab, ¿Te pasa algo? te noto tensa, antes te he ofrecido una tostada con aceite y sésamo y casi me la estampas en la cara. Tú no eres así.. - le digo de forma cariñosa pero mostrando preocupación
- Lo siento Nor, hoy no tengo el día.. me he probado la falda esa que te enseñé de sfera, y parezco una vaca. Que digo una vaca, la mesa camilla de mi abuela paquita.
Y lo dice con una seriedad tan poco típico en ella, que entonces es como si saltara una pequeña alerta de que algo no va bien..
- Pero que dices, pero si te falta chicha, si puedes ser perfectamente una mezcla entre Rihanna y Bárbara Palvin. No me jodas hombre, dime que te pasa. - digo aterrada pero intentando no meter el dedo en la herida.
- Pero es que yo siempre me he visto genial, es este viaje, dos días que llevamos y siento como si hubiera engordado como un tonel. Mira mi culo, mira, tengo los cachetes más grandes de lo normal.
Observo en silencio su cuerpo mientras me va mostrando y escuchando sus paranoias, y pienso para mis adentros: pero que cabrona, si tiene el mejor culo de España.
- Pues Gabi, tienes el mejor culo de España coño, si tú tienes pegas de tu culo, mira el mío que tiene algo de celulitis so penca, en serio te digo que tienes un cuerpazo. Y no, no lo digo porque soy tu amiga, ya sabes que yo digo las cosas tal como son.
Una sonrisa empieza a asomar por su carita, a veces entre tanta brutalidad se me olvida que en el fondo sigue teniendo esa parte de niña que sigue vive en ella.
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Esto no es el principio de otra estúpida película de Netflix
RomanceSi eres alguien como Nora, una chica ambiciosa, a veces con las ideas claras y otras no tanto, si sientes preocupación solo por tus familiares, amigos y obviamente por ti misma... Si pensabas que tenías el mundo a tus pies, la vida que cualquier per...