¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ASKELLA
Si los dioses decidieron abandonar a una persona, estoy segura de que fue a mí.
¿A qué otra chica le habría ocurrido que dos gansos se le abalanzan encima? ¡A nadie más!
Estoy segura que en el día de mi nacimiento a mi madre se le olvidó consagrarme a un santo y por eso es que mi vida entera es una broma. No cuento con la protección divina, de modo que estoy expuesta a cometer cualquier ridiculez.
Pero ¿Por qué, astros? ¿Por qué tenía que ser con Darek? De todas las personas que habitan Aeonian, tuvo que ser con el pelirrojo más guapo que he conocido y cuya reputación lo precede como el peor de los sanguinarios. Habría preferido el que se le cayera la cabeza a una de mis muñecas a tener que vivir un momento tan vergonzoso.
También quisiera preguntarles, queridos dioses ¿Por qué el hombre de la fotografía tenía que ser Darek Cálix Bruciare? ¡Yo quería una historia de amor de ensueño, no relacionarme con un posible asesino serial!
Temí más por mi vida que lo que disfruté cuando preguntó por mis pecas. Ese hombre puso a cada uno de mis vellos de punta, incluso al encontrarme empapada de pies a cabeza.
En resumen, nuestro primer encuentro fue una fatalidad.
Para colmo, ahora le tengo miedo a los gansos.
Al regresar a la habitación, acompañada de Elinor, mi doncella estaba muy rígida y se comportó con más rectitud de lo que ya lo hacía, y mientras ordenó que prepararan otro baño con agua caliente, yo me eché a llorar todavía con el cabello enmarañado a causa de los pétalos de glicinas.
Elinor trató de consolarme y yo sólo lloré más.
Quería vivir algo mágico con el pelirrojo que vi en la fotografía. Imagina que nuestro encuentro sería al igual que esas películas románticas, que descargaba de manera ilegal en el portátil, y por fin se cumpliría mi deseo de dejar de ser una espectadora. Toda la vida le he rogado a los dioses y a los santos que manden un buen hombre a mi camino para que sea mi novio. Y parece que recé por lo contrario.
Soy la doncella a la cual nunca rescatarán de la torre, así de miserable es mi destino.
¿Por qué lo digo? Porque no le agrado a Darek, sé bien que contuvo a sus ganas de decapitarme y no fue precisamente por tener una cara bonita; le causó gracia mi miedo y lo patética que fui al rogar por mi vida.
Apuesto a todo lo dulce del mundo que pronto comenzará a investigar sobre papá y averiguará que yo nunca abandoné la mansión durante diecisiete años, luego nos traerá a los dos frente a su trono: A papá le dará cuello por haber hecho tratos con un serpentum y conmigo primero se burlará de mi falta de experiencia, para después aniquilarme también.
¡No me quiero morir! Prefiero dormir entre ratas antes que tener una soga alrededor de mi cuello.
Por esa misma razón no he abandonado mi habitación desde que lo conocí: Para aplazar a mi inminente ejecución a manos del emperador bárbaro.