ᴅɪғғᴇʀᴇɴᴛ • MYG

^6^

Después de un par de horas Yoongi ya se encontraba descansando sobre mi cama. Jin estaba con junsu en la sala tratando de distraerlo un poco de toda aquella situación.

Muchas preguntas pasaban por mi cabeza, pero ninguna tenía alguna respuesta.

Los minutos parecían eternos. No despegaba los ojos de Yoongi esperando que pronto recuperara fuerzas y me hablara sobre lo ocurrido. Me levante de aquella incomoda silla y me senté a su lado acomodando mi espalda en el respaldo de la cama, acaricié con cuidado su cabello.

Me perdí en mis pensamientos una vez más hasta que un movimiento por parte de Yoongi me regreso rápidamente a la realidad. Estaba acostado boca arriba observándome con atención, me puse un poco nerviosa ante la intensidad de su mirada y terminé por alejar mi mano de su cabello.

—hola— susurre con una sonrisa de alivio en mi rostro.

Yoongi no respondió, en lugar de eso se acomodó en la cama hasta quedar sentado en medio de esta. Observó al rededor por unos segundos antes de regresar su vista hacia mi.

— Entiendo si estás cansado, pero creo que sería bueno que comieras algo para...

La oración no pudo ser completada debido a que los labios de Yoongi se encontraron con los míos de manera rápida y brusca dándole paso aún beso totalmente necesitado. Todo este tiempo había estado anhelando sentir sus labios nuevamente. Ladeé la cabeza un poco acomodándome mejor permitiendo que el beso fluyera mejor, sujetó mis mejillas como si tuviera miedo que me alejara de él. Me permití abrazarlo por el cuello sin importarme que mi amigo y junsu estuvieran esperándonos en la pequeña sala de mi hogar, un suspiro se me escapó al sentir como sus pulgares acariciaban mis mejillas con lentitud y delicadeza. Una de mis manos se escurrió hasta su cabello mientras los labios de Yoongi bajaban a mi cuello y aquello hubiera llegado a más de no ser por que una leve mordida de su parte en mi cuello me hizo reaccionar.

—Yoongi...espera—pedí colocando mis manos en sus hombros para alejarlo un poco.

Me miró algo confundido ante mi acción. Trate de concentrarme en algo más que no fueran sus labios rojos e hinchados, sonreí levemente concentrándome en su mirada.

—¿me podrías decir que ocurrió?— pregunté preocupada al recordar la imagen de Yoongi frente a mi puerta antes de desplomarse. —¿fue Namjoon?

—no realmente— mi corazón se relajó al escuchar su profunda voz de nuevo—lamento llegar hasta ahora, pero como era de esperarse el líder bloqueó las salidas, Bueno solo a mi. Namjoon me prohibido salir de la aldea, me negué a escucharlo y terminé encerrado en mi propia cabaña

—Te encerraron—susurre repitiendo sus palabras—¿te hicieron algo más? No te vez del todo bien

—a decir verdad, me comporté de la única manera que podía en ese momento; impulsiva. No comí por días, lo hacía para que Namjoon se enterara y se diera cuenta que mi decisión de verte no solo era algo pasajero. —tomé sus manos con fuerza prestando atención a cada palabra. —discutimos mucho, pero aunque ahora lo aborrezco, mi hermano no es alguien tan cruel ni sanguinario.

—supongo que funcionó

—no realmente. Cuando se dieron cuenta de que junsu no estaba comenzaron con una búsqueda que fue la distracción perfecta para irme sin que se dieran cuenta. Les tomará un tiempo encontrarme, por eso mande a copo, en su forma animal es más fácil rastrear su olor y por eso mismo yo no me transforme. No quería ponerles las cosas fáciles para que me encontraran

—esto es una locura— admití después de soltar un suspiro— estaba muy preocupada por ti yoongi, no sabía que había sido de ti. Pensé muchas veces en ir a verte, pero no estaba segura de hacerlo y ahora me siento más que culpable por eso, te arriesgaste para estar conmigo de nuevo.