Haré lo que quiera contigo [◕♡Nammin◕♡]

|♥︎𝑷𝒓𝒐́𝒍𝒐𝒈𝒐♥︎|

═════════════════════

Ahora mismo Kim Namjoon, un estudiante de la Universidad se encontraba rumbo hacia los complejos de apartamentos de la universidad en la cual estudiaba. Su ceño fruncido con enojo haciéndose notar a lo lejos, cualquiera que conocía al rubio sabía que estando en esas condiciones no podrían acercarse a el. Resumiendo había tenido un mal y jodido día. Las personas con las que tuvo que verse habían cancelado sus planes a última hora prácticamente estando todo listo. Y sí, estaba bastante molesto con ellos por que no era la primera vez que eso pasaba .

A Namjoon realmente le llegaba a molestar las personas así, indesisas, que no se pusieran deacuerdo para hacer las cosas bien. El era una persona seria eh exigente que le gustaba que se hicieran las cosas bien, a su manera.

Pero no lo mal entiendan, el no era una mala persona que hiciera daño por hacer o que hiciera sufrir a los demás sin motivo. Tampoco era así con sus amigos, simplemente había cosas que podían llegar a enfadarlo, pero dentro de todo se consideraba una persona seria y madura. Admitiéndo que aveces tenía un mal genio, no era extrovertido. Del grupo de sus amigos lo consideraban a el como el más serio y frío.

Nadie se le acercaba para fastidiarlo ya que conocían bien su mal genio en la universidad, por sus actitudes toscas hacia las personas. Tenía una fama y pinta de ser el chico explosivo que te metería una buena paliza si no medías tus palabras.

Ese era Kim Namjoon, un chico Guapo Rubio de 22 años que podía llegar a enamorar a cualquiera con su perfecta estatura de 1.82

Pero no muchas eran las o los afortunados de poder estar con el, muy pocas cumplían con sus estándares y sus exigencias de las cuales muy poco se sabían. Según las personas a su alrededor el era "100% Heterosexual" Pero Namjoon tenía un secreto, un secreto que pronto el mismo admitiría y descubriría en su totalidad.

Después de mucho tiempo al fin pudo llegar al complejo de habitaciónes. Entró en el y apretó el botón para llegar a su piso.

Irritado y cansado se recargó en una esquina, moviendo un poco impaciente su pie, en estos momentos ese movimiento con el sonido de sus pesadas botas negras contra el ascensor le parecía lo más interesante dadas las circunstancias. Para su bendita pasiencia que portaba ahora se le hizo casi eterno el tiempo después de que la puerta al fin se abriera.

Caminó por el pasillo hasta llegar a su habitación, abrió esta sin hacer mucho ruido. Entró y la puerta se cerró detrás suyo, se sacó su chaqueta negra y la colgó en el perchero al lado de la entrada .

Hizo un movimiento con su cabeza con un poco de confusión y una de sus perfectas y gruesas cejas se levantó, ya que todo ahí estaba en silencio y tranquilidad .

Lo cual lo extrañó ya que su compañero de habitación más o menos a esta hora estaba estudiando en la sala o comiendo algo en la cocina. Pero casi al instante le restó importancia, por que la verdad poco le importaba lo que ese mocoso malcriado hiciera.

A pasos normales fue hasta la cocina y abrió el refrigerador buscando algo para beber. Lo que encontró fue un poco de jugo en una botella, tomaría eso por el momento, lo que a él más le gustaba eran las gaseosas y las cervezas. Pero se conformaría con esto por el momento. Giró su gran cuerpo hacia las alacenas o despensas para coger un vaso.

Tomó el vaso entre sus manos bebiendo mientras con la otra sostenía su celular viendo si tenía mensajes de sus amigos. Así se dirigió a su habitación, pero cuando estuvo por llegar a la puerta algo le hizo detener sus pesados pasos.

Su cuerpo paró en seco en pleno pasillo, su ceño se frunció sin entender lo que estaba pasando, y sin comprender lo que estaba llegando a sus oídos en estos momentos.

¿Gemidos...?

Acaso lo que venía de su habitación...¿Eran gemidos?

Pero que carajos estaba pasando ahí, como podía ser que de su jodida habitación de la cual el siempre cerraba con seguro las veces que salía estuvieran proveniendo esa clase de sonidos obscenos.

Apretando su celular en sus manos de la rabia de que alguien estuviera ahí invadiendo lo que era su espacio sin su autorización. Guardó su celular en su bolsillo y se acercó despacio a la puerta. Poniendo su mano en la manija se percató de que esta estaba sin seguro....¿Como carajos podía ser eso posible?.

Cada vez que salía del departamento siempre cerraba con llave a pesar de que solo vivieran dos personas en el jodido departamento.... ¿Acaso?.

Abrió lentamente la puerta arrepintiendose casi al instante de haberlo hecho....

Su mandíbula casi cayó al suelo de la impresión. Pero lo que sí cayó de sus manos fue el vaso, que afortunadamente no se escuchó por la alfombra del pasillo. Pero si escuchándose una lijera música en la habitación.

El rubio no daba crédito a lo que sus ojos estaban teniendo la dicha de presenciar en este preciso momento. ¿Acaso podría hallar las palabras correctas para describir y definir lo que estaba pasando frente a sus ojos?...

❝ 𝑴𝒂𝒈𝒏𝒊́𝒇𝒊𝒄𝒐❞......eso era lo que sus negros y calientes ojos estaban viendo......Vaya.....Namjoon no sabía que se sentiría tan bien ser recibido de esta manera...

❝ Próximamente....❞

♥︎ Resubiendo este Three Shot NamMin, espero que nuevamente lo lean y lo disfruten.♥︎