Una Noche Más // (Sana y Tú) (Finalizada) ©

Capítulo 22 (Cobardía)

Narrador: 3° persona.

- Dahyun...? Llamó su madre por fuera de la habitación- hija... ya está lista la comida, te espero abajo.

- Voy- respondió dahyun sin emoción.

Dahyun bajaba las escaleras sin ningún interés, tomó una silla y se sentó.

- ¿Y papá?

- Tuvo que salir al trabajo.

- Ah ok...- contestó fríamente.

La señora Kim miró triste a su hija, soltó los cubiertos antes de decir la primera palabra para llamar la atención de su hija.

- Dahyun... no puedes seguir así...

- ¿Cómo así mamá?

- Sólo viviendo, ya sólo respiras. No tienes nada que te motive.

Dahyun miró a su madre, con dificultad sostuvo la mirada, hata que la volvió a bajar en dirección a la mesa.

- Se quién era ella...- de inmediato dahyun subió su mirada. - siempre lo supe... era muy obvio hija. Sé que fue difícil el traerla hasta acá.- la señora kim tomó la mano de su hija- somos humanos, y nos equivocamos, no somos perfectos, tenemos que equivocarnos para aprender de eso, eso... es lo que nos hace fuertes.

Dahyun sostenía sus lágrimas, quería mantenerse fuerte ante su madre, pero esas palabras la hacían derrumbarse.

- Intenté arreglarlo, pero no funcionó, ella no quiere saber nada de mi.- habló controlando sus lágrimas -créeme... lo intente...

- Hija... mirarme!!- dahyun levantó su mirada con dificultad para mirar los ojos de su madre- no esperes la aprobación de nadie, ni siquiera la de nosotros. Entiende esto, nunca dejaremos de amarte, antes que nada eres nuestra hija, y te queremos ver feliz, no hay nada más importante para nosotros que tu... que tú seas feliz. Así que ve... y recuperala...

Dahyun trataba de sonreír, pero la mezcla de emociones era tanta, que las lágrimas se mezclaron con las de alegría, no sabia como empezar a hablar.

- Mamá... pero la negué, ni siquiera yo me puedo perdonar eso...

- Entonces... hora tienes que reconocerla!!- dijo la señora Kim con firmeza- haz algo que le demuestre, lo que es ella para ti.

Entre las lágrimas que caían sobre el rostro de dahyun, una sonrisa de felizidad se escapaba.

-Gracias mamá...

Dahyun de levantó de su asiento, y fue directo a abrazar a su madres. Esas, eran las palabras y la fuerza para dejar de estar huyendo.

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Narrador: Sana

Los días pasaban, y no podía estar más feliz que ahora.

Mi relación con T/n estaba llendo de maravilla, a pesar de que yo seguía trabajando en este lugar, íbamos por buen camino.

Cada vez era más fuerte, podía decir que era la primera vez en mi vida, que era feliz.

Estaba en el prostíbulo un día más en ese lugar, pero no importaba, lo que me mantenía fuerte era pensar, que saliendo de aquí, iré con T/n, me hacia continuar, ufff... voy a seguir fingiendo ser una excelente empleada, anhelo salir de éste maldito lugar pronto.

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Aquél hombre pasaba su mano por mi cadera, tenía que fingir que me gustaba.

Sonreí, y le ofrecí la mejor cara de seducción que podía dar.

- Sabes que te gusta nena!!!

- Mmm- solté con una voz ronca- sabes lo que me gusta.