A veces, la vida te Golpea tan fuerte que nisiquiera lo ves venir.
En un solo momento, todo lo que solías conocer desaparece por completo.
Y pasa en un abrir y cerrar los ojos. Algo que nunca debiste presenciar en primer lugar, sin embargo, sólo ese segundo se encarga de destruir el futuro que siempre quisiste tener.
Y lo único que puedes hacer, es servir el plato de venganza lo más frio posible.