Al no encontrar la llave para abrir el pequeño candado, Michell fue por el martillo.
Y una vez abierta la cajita, comenzó a pasar una por una las notitas y tomó la que tenía la fechas más antigua.
Escribo, porque segùn lo que me dijo ella, me aligerará el alma, y las hojas donde escribiré seran excelentes confidentes, que pronto se convierten en mis mejores amigo.
¿Y decían que la rara soy yo?
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¿Y si vuelo?
RandomUff, aún falta ese closet por empacar. Hace tanto que no saca cosas de ahí, incluso hay algunas cajas sin abrir. ¿Qué es eso? Es un cofresito de madera, como en el que guardaba papeles y cartas cuando era adolescente. ¿Qué habrá dentro? La solución...