III

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Y no metí las manos...
No hasta que estuvieron a punto de usar las bombas nucleares. Ok, no eran bombas nucleares, pero intentar subir fotos vergonzosas de tu amiga es llegar muy lejos.

Sigue sin quedarme totalmente claro como fue que esas dos chicas acabaron con su amistad por culpa de un decerebrado con buen trasero... ¡Ah! Ya entiendo: es eso, un trasero bien trabajado, una idea falsa de belleza que poco a poco nos hemos ido creyendo. Una idea que se ha sobrepuesto a los sentimientos y valores de las personas.

Yo nunca le daría tanta importancia a mi apariencia. Si alguien va a gustar de mi, que sea por mi interior y no por mi físico.

P.d: Hoy tuve clase de formación cívica, por eso tan inspirada.
P.d 2: La verdad es que soy muy floja para arreglarme por las mañanas.
~Michell

¿Y si vuelo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora