Capítulo Uno

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Doumeki se encontraba en el almacén de la oficina limpiando con un paño los cristales y ordenando cajas pensado en Yashiro. Era inevitable el no pensar en él, en su mirada, en su risa, en las veces que su Kashira le había tocado intensificando sus sentimientos sin poder corresponderle físicamente a sus delicadas caricias ahí abajo. Se sentía frustrado, lo estaba queriendo cada vez más . La última vez que Yashiro había querido tener un ratito con su parte íntima, está estuvo apunto de despertar y tuvo que salir del paso como pudo, para que no pensara en echarle después de saber que él, ya sentía sus caricias,sabía que la próxima vez ya no podría contenerse y tenía miedo de dejarse llevar y ver que es lo que sucedería.
Sintió un suave aire en la nuca y al girarse se topó con lo que tanto anhelaba,
ahí estaba él, su todo, mirándolo intensamente con esos ojos que le traspasaban el alma, le hacía latir el corazón de una manera que creía no poder respirar pero Doumeki siempre le devolvía la mirada, intensa, fuerte, con convicción, no podía flaquear en su presencia por mucho que le doliera el no poder tocarlo si su Kashira no daba el primer paso. Y así sucedió:
-¿Que estás haciendo Doumeki?.
-Limpiar el almacén Kashira-
-¿Y por qué no lo dejas un rato?, aún no he desayunado. - Yashiro lo miró por un segundo en la entrepierna y volvió a los ojos de Doumeki.
-Kashira...-tenía tantas ganas,... Pero a la vez tanto miedo.
Yashiro se le acerco hasta quedar a unos centímetros de la boca de Doumeki, cuando esté noto el aliento mentolado y la cercanía, su corazón se puso a latir de tal manera que pensaba que Yashiro lo escucharía pero Doumeki sabía guardar muy bien las apariencias, aunque esta vez no podría aguantarse , se le acercó un poco más y le susurró:

- Me muero por besarle Khasira.


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Continuara

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