Yuudai Gojo es un joven con un pasado oscuro que reecarno en cierto mundo donde vivirá aventuras y derrotando enemigos poderosos, volviéndose el ser más poderoso.
¿Podrá alcanzar el objetivo que tanto anhela?
¿Llegara a hacer el más fuerte de todos...
-¿Te hacen llaman el Joven Demonio más Fuerte con esos golpes de niña que das?-. Sairaorg estaba en pose de batalla con el sudor recorriendo su cuerpo. Estaba la respiración algo pesada debido al cansancio de nuestra batalla que estaba transcurriendo en una de las Arenas de entrenamiento de Goaut.
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-¡Por favor, valla con todo su poder, lo recibiré con todo el gusto del mundo!-. Esa sonrisa de confianza que tenía era irrompible.
-Bien...-. Me abalanzó en un destello dándole un puñetazo derecho en el plexo solar haciéndole arquear del dolor por el impactó.
-Buen Golpe-. Me da un derechazo en la mejilla que no logró moverme, en cambio me hizo soltar unas cuantas carcajadas.
-¿Porqué no terminamos con esto de una vez, Sairaorg?-. Nos separamos tomando distancia uno del otro, un aura blanca lo rodeó habiendo un aumento en sus capacidades, despertó el Touki. Una pequeña sonrisa se forma en mi rostro, me quedó parado en mi eje con los brazos cruzados.
-Te esperó, no movere un solo dedo, como tu dijiste. "Recibí todo el poder con el mayor gusto del mundo"-. Sairaorg en un instante estaba delante mío, un puñetazo izquierdo estaba delante de mi cara llendo a camara lenta. Recibí el golpe en mi frente pero no me hizo nada, ni siquiera logró moverme unos milímetros.
-¿Querías que fuera con todo, no es así?-. Le di un puñetazo izquierdo en la cara haciendo que sangrará de la nariz, el golpe le causó efecto ya que por poco pierde el conocimiento, creó que me excedi, la asimilación con Arahabaki me dio un inconmensurable aumento en mi fuerza.
-Hasta aquí llegamos, Sairaorg-chan. Puedes descansar-. Cuando le dije eso, calló sentado al suelo con su respiración agitada, el sobre esfuerzo es malo parecer ser que lo hice llegar a su límite.
-¿Cómo es tan fuerte, Dai-sama?-. Sé limpió el sudor de su frente con el antebrazo izquierdo.
-Ya te dije que me dejes de tratar con el "Sama", solo dime Dai. Y contestando lo anterior, pasé por un riguroso entrenamiento desde que tengo 4 años- sacó una botella de agua de un circulo mágico -El impulso de ser más fuerte me llevo hasta donde estoy-. Le doy la botella de agua agradeciéndome por ello, me siento en el suelo delante de él hasta que se me ocurre sacar un lindo tema para hablar.
-Nee Saira-chan, últimamente he visto que te has vuelto muy cercano a Ingvild, ¿estás saliendo con ella?-. En ense momento escupió todo el agua en mi cara, si no fuera por el Infinito estaría empapado.
-¿D-de donde escuchó eso? Además lo que dice no es cierto...-. Tenía un leve rubor en su rostro.
-Tengo que estar al tanto de la situación de mis subordinados. Ahora cuéntame, vamos no diré nada-. Le dije con algo de picardía.
Se rasca la cien con el dedo índice derecho, es algo muy raro ver avergonzado al Rey. -Solo hablamos de vez en cuando, combatimos en los entrenamientos cuando vengo a Goaut, o compartimos experiencia de batallas, pero nada más que eso...-
