Capítulo 12

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El viaje es de 12 horas, estoy incomoda, me duele la cabeza y para empeorar la situación la azafata no a dejado de coquetear con seshomaru, mis manos se hacen puños bajo mi falda cierro los ojos tratando de no verlo de....

Pasos se escuchan a mi alrededor, abro los ojos encontrando a seshomaru sentado en el haciento de enfrente, mirandome.

- ¿Porque? _Pestañeo un momento tratando de entender su pregunta.

-Disculpe no lo entiendo- toma otro sorbo de su bebida

- Digame, ¿por que no dijo la verdad desde el principio?-

-Yo...yo no puedo decirle-

-El bastardo le prohibio hablar- una  sonrisa ironica se planta en su rostro haciendome enojar.

- No lo llame así, se llama inuyasha y no, no me prohibio hablar-

-Son tal para cual, dime ¿el bastardo sabe la zorra de esposa que tiene?.

Me paro de golpe y lo le doy una cachetada para que no vuelva a insultarme, pero más que el insulto me dolio lo que el piensa de mi.

-No vuelva a insultarme, y si no mal recuerdo es usted igual casado y en su momento tampoc.... - seshomaru se para de golpe de su haciento haciendome retroceder y en el proceso por el pequeño espacio caigo en mi haciento, me toma de las manos y los lleva arriba de mi cabeza, su respiración esta cerca de mis lavios, y cuando siento que me va a besar desvio la mirada no quiero nada de él.

-No vuelva a levantarme la mano, y usted sabia desde un principio que yo estaba casado.

Seshomaru suelta mis manos retrosediendo un poco.

-claro que me lo dijo, pero se le olvido el detalle de su hijo-

-Eso no te quita lo zorra-intento darle otro golpe, pero ne detiene

-Ni se le ocurra-suelta mi mano y se va a sentar al otro lado de los hacientos.

***
Aterrizamos en Roma de noche, y nos dirigimos directo a un hotel, en todo el camino hacia el hotel seshomaru y yo no volvimos a hablar,y creo que es mejor de ese modo, llegamos al hotel y solo es pedir la llave de la suite.

Los trabajadores se encargan del equipaje y cuando estamos por tomar el ascensor seshomaru le da instrucciones al trabajador que me dejen en la habitación y el solo se va... antes de que se cierre la puerta lo tomo de la mano saliendo del ascensor.

No deberia importarme, pero lo hace.

-Debe descansar, ya tomo demasiado.

Seshomaru da un par de pasos acercandose y se inclina un poco para que solo yo pueda escucharlo.

-Se esta preocupando por mi, higurashi- doy unos pasos atras para mirarlo a los ojos

-Señor- se va soltando de mi agarre y lo sujeto con más fuerza -seshomaru, por favor -nos  miramos un momento.

-vamos- caminamos hasta la suit sin soltarnos de las manos, pero cuando llegamos lo suelto, no puedo permitirme tener ese tipo de acercamiento.

Acomodo mis cosas en mi habitación y cuando vuelvo para cerrar la puerta me quedo quieta ante la vista que me da el balcón de la ciudad de Roma.

Embelezada que quedo quieta admirando la ciudad.

Unas manos se posan en mi cintura acariciando como un amante, sus lavios depositando pequeños besos en mi cuello haciendome soltar un pequeño gemido, no deberia de gustarme, deberia parar, pero todo pensamiento se va desvaneciendo con sus caricias.

-sesh...-

Hace que gire sobre mis talones, quedamos a unos pequeños sentimetros alejados contemplandonos en la oscuridad, no es necesario palabras, por que nuestros ojos gritan lo que nuestros lavios no pueden decir.

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