Blancanieves ; Hyunmin

Héroe

Un pequeño niño de tez blanca, ojos grandes y cabello azabache se encontraba sentado en una de las mesitas del salón de clase, leyendo un libro de princesas.

-¡Min! - El nombrado levantó su cabeza con la boca entre abierta buscando a quién le había llamado.

-¿Qué quieres yuna? - Preguntó el pequeño cerrando su libro.

-¡Ew! ¿Pol qué lees liblos de plincesas? ¡Eso sólo lo hacemos las niñas! -Gritó la pequeña, sin poder pronunciar bien la ' R ' debido a su corta edad.

Seungmin abultó el labio inferior e infló sus mejillas -¡No es cierto! Los niños también pueden podemos leer cuentos de plincesas, ¡a mí me gusta mucho Blancanieves! - La niña frunció el ceño.

-¡Lia! ¡yeji! ¡Vengan! - Las mencionadas dejaron de jugar con la casita de muñecas y se dirigieron hacia donde estaba su "amiga" - Miren al tonto min, está leyendo cuentos de plincesas, ¡se clee niña! - Las niñas empezaron a reirse mientras señalaban al pequeño, que empezaba a sentir sus ojos picar.

-¡Niña! ¡Niña! ¡Min se clee niña! - canturreaban las menores.

Seungmin estaba con la cabeza gacha, un puchero adornando su hermoso rostro, mientras que por sus ojos caían unas cuantas lágrimas a causa de las burlas que estaba recibiendo.

A él le gustaban los cuentos de princesas. También le gustaba jugar con muñecas y vestir colores claros y pasteles ¿Era malo que a un niño le gustase eso?

Las niñas seguían burlándose de él, hasta que un pequeño castaño se acerco a ellas.

- ¿Pol qué se burlan de él? - Dijo posicionandose al lado de la mesita dónde Seungmin estaba sentado.

-Polque a la niña min le gustan mas plincesas - respondió de manera chillona yuna.

-Esta bien que le gusten las plincesas, y... - el castaño bajó su mirada y achicó los ojos para ver el nombre que decía el sticker rosado pegado en la portada del libro - y es Seungmin, no min - El mencionado levantó lentamente su cabecita para ver a su héroe.

-Ustedes son malas y feas - El castaño saco su lengua para molestarlas, haciendo que las niñas Chilláran y se alejarán de ahí.

Seungmin seguía viéndolo con la boca entre abierta, dejando notar sus dientecitos.

Estaba sorprendido de lo que había logrado su contrario.

- ya no te fastidiarán - Bajó la cabeza para ver al azabache, acompañando de una hermosa sonrisa rectangular.

El pequeño Min se sonrojó ligeramente al ver aquella linda y peculiar sonrisa.

-Gracias, e-eres mi héroe, bonito - Seungmin abrazó por la cintura al contrario, sin levantarse de su asiento.

-Nop, no soy un héroe. Soy JinJin, cachorrito - soltó una pequeña risita y acaricio los cabellos del azabache sonrojado.

A partir de allí, siempre veía a Hyunjin, su corazón latía más rápido de lo normal, como si fuese a salir de su pechito.

Después le preguntaría a su mamá si eso era normal.