II. Marca.

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ADVERTENCIAS: Hola, antes de que empiecen a leer me gustaría dejar en claro algunas cosas. Si se tomaron el tiempo de leer la sinopsis y algunos de los temas a tratar aquí, ya deben saber que hay CONSENSUALIDAD DUDOSA y UN POCO DE DARK XICHEN. Dicho esto, puede parecer que XiChen es el malo que hace sufrir al pobrecito Jiang Cheng pero NOOOOOOOOOO, eso no es así o al menos habrá una explicación para lo que se aparenta.

No acostumbro a poner mucho drama en mis historias de hecho pocas veces lo he hecho, pero en esta ocasión quise intentar algo diferente. Hay una explicación para todo y llegará el momento en el que las cosas se aclaren y se entiendan, lo digo porque recuerden que esto es un OMEGAVERSE y quiero jugar bien con la temática. Habrá un Lan XiChen muy posesivo y algunas cosas se pondrán intensas pero al final todo se va a resolver como en todas mis historias porque no me gustan los finales tristes ni hacer sufrir demasiado a JC y LXC.

 Otra cosa que igual me gustaría mencionar es acerca de las parejas secundarias, ya quedó claro que habrá NingSang, Xuanli y pues el WangXian que viene siempre de cajón. Aun no estoy segura de las demás pero probablemente (99% seguro) verán NieYao, eso sí grabenselo bien: nunca voy a escribir xuexiao y en mis fics si así lo amerita verán al ciego y al zombie juntos como pareja (no sé si aquí aparezcan pero de una vez aviso), fin. Dicho lo anterior, si se sienten incómodos con la idea de alguno de esos temas o ships, les pido por favor que se abstengan de leer.

Ahora sí, procedan con precaución a la lectura, saludos.

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El cuerpo entero de Jiang Cheng ardía, no era capaz de concentrar su vista y observar a donde había sido llevado. Solamente sintió que fue recostado en una cama no muy mullida, miraba al techo mientras le quitaban los zapatos y soltaba algunos quejidos sintiendo el malestar por todo su cuerpo.

– Alfa... – llamaba a Lan XiChen con lágrimas en los ojos, el calor en su cuerpo era insoportable al igual que el dolor en su vientre bajo.

Para Zewu Jun escuchar que su omega ya lo reconocía como su alfa, fue totalmente satisfactorio. Aunque no tanto como sería estar dentro de él.

– En un momento A-Cheng, en un momento te haré sentir mejor – respondió el con su habitual tono tranquilo y suave.

Cuando lo tuvo a Jiang Cheng en sus brazos, se apresuró por llevarlo hasta el Hanshi. Se había topado en el camino con algunos discípulos, pero con nadie como su tío, su hermano o algún mayor que pudiera detener su paso. Seguramente pronto alguien lo estaría buscando y llegarían para llamar a su puerta, por eso debía apresurarse para que sus feromonas de alfa detengan el paso de cualquier otra persona mientras se apareaba con su omega.

Terminó de desnudar a Cheng de la cintura para abajo y procedió a quitarse sus propias túnicas. Se detuvo un momento para mirar a su omega que se retorcía en la cama en espera de ser tomado y follado para aliviar su calor, tenía su miembro erecto y muy duro derramando líquido lubricante, con su aroma llenando toda la habitación. Lan XiChen no pudo esperar más, se deshizo del resto de su ropa con rapidez, excepto cuando le tocó desatar su cinta de la frente. Antes de aproximarse a él, ató su cinta en su muslo derecho y luego se apresuró para colocarse encima del omega en su cama.

El menor sudaba frío, gemía y con mucho trabajo era capaz de abrir sus ojos y distinguir lo que había a su alrededor, todo era borroso, pero sabía perfectamente con quién estaba. XiChen se mordió los labios y acarició la frente de Jiang Cheng removiendo los mechones del flequillo que se le habían pegado a la piel por el sudor.

– Estoy aquí, mi lindo omega – se acercó a su cuello para aspirar el embriagante aroma a lotos – ya te sentirás mejor, yo voy a ayudarte... al fin serás mío.

Solo MíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora