Destructive

|Capitulo 02: El huesped|

El murmullo del agua corriendo me hace abrir los ojos lentamente.

Me estiro, Aun atrapada en el sueño. Mi brazo se encuentra tapando todo el lado izquierdo de la cama y cuando soy consiente de que no hay nadie junto a mi, me levanto de golpe.

Enderezo los hombros y examino toda la habitación sin perderme ningún detalle.

¿Que fue lo de anoche?. 

Muerdo mi labio, tratando de recordar. ¿Fue un sueño?, ¿Alucinación?, ¿Sera que le puse mucho café a la taza?, ¿O es que Lucy nuevamente me a metido uno de esos raros hongos que tiene siempre en casa?.

Agudizo el oído, pero lo único que logro escuchar es la brisa mañanear y el roce de la rama contra la ventana. Restriego  mi ojo sin poder creérmelo aun, Realmente no ocurrió. 

Pareció tan real.

Bostezo y rasco la enorme y ondulada melena mañanera que tengo mientras tomo mi teléfono. Son las 11:30.

Me levanto, Aun llevo la ropa de anoche, Unos cortos pantaloncillos blancos y una camiseta holgada que decía RUDE. La gorda jodie no esta por ningún lado, lo cual me sorprende porque lo primero que hace es venir a pedirme comida.

El largo pasillo se abre ante mi, invitándome a pasar. La casa esta igual que anoche, todo exactamente como lo deje. Trato de buscar fragmentos en mi confusa mente, pero lo único que logro encontrar son mas incógnitas. Llego a la conclusión de que debió ser a consecuencia de mi cansancio y sueño. Una vez Lucy soñó que estaba en un concierto de su banda favorita, The beatles, y al día siguiente se levanto mas entusiasmada que deportista con esteroides. Luego se dio cuenta en que año estábamos y cayo en una exagerada depresión de tres días.

Digo, estas cosas pasan todo el tiempo, ¿No?. ¿Que posibilidades hay que un alienigena este en mi casa en estos momentos?

De repente, mi pie impacta directo con un charco. Retiro el pie, Algo extrañada. Bueno, esto no estaba aquí anoche.

Es de un color azulado, Como si fuera...¿Sangre?.

Me inclino, para observar mejor. Hundo mi dedo indice y lo hago chocar con el dedo pulgar, esta helada. 

Mi parte racional me dice que puede ser cualquier cosa, Pintura para cuadro, plasticina derretida...Jugo de color azul y viscoso. Cualquier cosa menos lo que estoy pensando.

¿Pero que tal si lo es?, ¿Que si no fue un sueño?.

Mis ojos se abren como plato, oh por dios.

Justo en ese momento algo suena en el baño, La cadena, para ser exactos. 

Me giro rápidamente, tomando lo primero que encuentro a mi paso, lo cual resulta ser una pobre lamparita de mesa que nunca le hizo daño a nadie en su corta vida.

Camino lento, con tal de no hacer ningún ruido. ¿Y si es un ladrón?, ¿Un secuestrador?. 

¡Todo menos un alienigena!.

Envío plegarias silenciosas hacia Buda, Casi rogando poder salir entera de esta.

Entonces, unos descalzos y bonitos pies están frente  a mi. Le sigo la pista, comenzando por unos gastados jeans azules que me son muy familiar, Un fornido y duro abdomen me saluda, seguido por pectorales y unos brazos bastante musculosos. Pero cuando llego a su cara, Oh-Dios-Mio, pude haberme desmayado en ese mismo segundo.