summer rain 🌧 hasahi

OO9

—Y luego fuimos a... fuimos a-

Haruto se acuerda de lo que está hablando, por lo que estalla en un ataque de risa aún más fuerte antes de que Asahi pueda siquiera terminar su oración. Asahi continúa y comienza a reír también, contagiándose de las carcajadas de Haruto.

—¡Díos mío!

Sus hombros tiemblan y su estómago comienza a doler por lo mucho que se rie, pero no puede parar; golpea con su mano todos los lugares donde puede encontrar espacio, su muslo, el muslo de Asahi, el pecho de Asahi. Ese es el hábito de Haruto al reírse. 

—¿Lo recuerdas? —Asahi le pregunta.

—¡Éramos tan tontos! —Haruto dice mientras se seca los ojos con un suspiro de cansancio. Pequeñas risas aún escapan de sus labios, y exhala un largo rato para tratar de calmarse.

Alguien pasa junto a su banco y les da una mirada extraña, pero eso lo hace aún más divertido.

—Y después de eso, pasamos media hora tratando de encontrar-

—Encontrar la puerta de entrada, ¡Dios mío! —Los labios de Haruto se curvan hacia arriba una vez más, las risas salen de él más como sollozos, como jadeos por aire. Mira a Asahi riendo y eso solo intensifica todo; el recuerdo es viejo y estúpido. Y tan, tan divertido.

—¡Creo que dimos la vuelta a ese restaurante diez veces! —Asahi echa la cabeza hacia atrás y se ríe, sigue riendo, ambos lo hacen.

Haruto tiene que secarse las lágrimas de nuevo, y cuando se encuentra con los ojos de Asahi, tiene que morderse los labios para evitar otro ataque de risa incontrolable.

—Éramos niños tan estúpidos. —dice Haruto, finalmente respirando correctamente y recostándose en el banco. Asahi está sentado de lado, con ambas piernas apoyadas, así que cuando Haruto mira hacia un lado, ve todo su rostro.

—Todavía lo somos, todavía no somos viejos.

—Sí. —dice Haruto.— Pero ya no somos estúpidos.

—Me gustaría argumentar eso. —dice Asahi y se gira hasta que su espalda también está presionada contra el respaldo del banco. Sus hombros se tocan. Envuelve sus brazos alrededor de sus rodillas dobladas y ambos dejan caer la cabeza hacia atrás para mirar al cielo, a las hojas de los árboles.

—Esa es una nube muy extraña.—señala Asahi hacia el cielo.

Siempre han hecho eso, cuando están en el parque, simplemente echan la cabeza hacia atrás hasta que les duele el cuello y miran las cosas al revés.

—¿Cuál? —pregunta Haruto.

—Todas ellas.

Haruto sonríe.

El clima, finalmente, no es demasiado caluroso ni demasiado lluvioso, y es una rara ocasión en la que pueden usar jeans y una camiseta sin que esté empapada al final del día. De todos modos, es casi de noche.

—Oye. —dice Haruto, volviendo la cabeza hacia un lado, todavía dejándola colgar. Asahi hace lo mismo, y ahora se miran el uno al otro, con los hombros juntos.

El cabello de Asahi se ve raro al levantarse así, pero deja ver su frente pálida, la cual siempre tiene su cabello cubriéndola.

—¿Sí?

—Sabes que puedes contarme cosas, ¿no?

Asahi hace una mueca. —¿A qué te refieres?

—Me refiero a cualquier tipo de cosas. Sé que lo sabes, y ya me cuentas cosas, pero solo quería recordártelo. Que puedes confiar en mi siempre... porque somos-

—¿Porque somos mejores amigos?

Haruto frunce el ceño. —Sí, ¿no es así?

Asahi pone los ojos en blanco, sonríe y vuelve a mirar al cielo aún al revés.

—Por supuesto que lo somos. Y, por supuesto, confío en ti Ruto. ¿Por qué últimamente estás tan sentimental? Es raro viniendo de ti.

Haruto suspira. Sigue mirando su frente descubierta.

—No lo sé... Siento que, recientemente, las cosas han sido un poco diferentes entre nosotros.

Asahi no despega su mirada del cielo.

—¿Qué quieres decir?

—No tengo idea.

—Entonces, ¿por qué lo dijiste? — Resopla y se ríe por un segundo.

—Solo tengo este sentimiento en mi pecho.  —explica Haruto. Fija sus ojos en Asahi, quien ni siquiera se inmuta, solo mantiene su mirada fija en las nubes.

—¿Es algo que tú o yo hicimos o simplemente un sentimiento general?

—Solo un sentimiento general.

Es el turno de Asahi de fruncir las cejas, en broma, y ​​levantar una mano en pregunta.

—Bueno, ¿hay algo que te gustaría cambiar, o ...?

—¿Entre nosotros? Nada, jamás. Odio los cambios.

Haruto le da un codazo en el hombro, pero todavía no es suficiente para que Asahi lo mire.

—No creo que hayas entendido mi pregunta...

Haruto no dice nada.

Asahi lanza otra pequeña risa al cielo.

—Deberías aclarar tus sentimientos un poco, Ruto.