Yukiteru Y Kurosaki

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—Entonces ¿Terminamos con nuestra misión? -preguntó un joven de 20 años, cabello azabache y ojos negros cual noche, Kurosaki Uchiha.

Habían pasado exactamente 50 años desde la muerte del gran Kage, Naruto Uzumaki, y 40 desde la muerte del fiel acompañante de Nanadaime, Sasuke Uchiha.

Cuando Naruto murió, causó un gran impacto en el mundo ninja, su héroe murió, y sin la existencia del ninja más fuerte de todos los tiempos la paz tan frágil que fue creada por el temor del monstruoso poder, se quebró, y nuevamente empezaron a crearse organizaciones, Guerras, volviendo a los tiempos de antes. Sasuke logró mantener esto a raya a pesar de que era difícil y no era el más indicado, pero cuando murió porque no soportaba seguir en ese cruel mundo sin su luz, todo terminó.

La nueva generación quedó a cargo de traer la paz, pues poco a poco fueron muriendo los mayores, pero no lo consiguieron, quedando únicamente como sobrevivientes Boruto, Sarada y Mitsuki.

Cuando Sarada al fin tomó el puesto como la Kyuudaime, todo llegó a su fin, el mal había ganado con la muerte de Sarada Uchiha y Boruto Uzumaki, sin poder hacer nada.

Ya no quedó ningún ninja fuerte que pueda enfrentar a los Bijuus, los cuales se encontraban atacando bajo el control de Uchiha's creados por algún loco.

Mitsuki, como último sobreviviente y ayudando a los más débiles, decidió buscar alguna forma de terminar con todo el caos, y en su búsqueda encontró notas de su padre, Orochimaru.

Aquellas notas describían como crear a dos seres con los ADN de los Hokage más fuertes, lo mismo con Uchiha.

"El ADN de Shodaime, Yondaime, Nanadaime sin duda crearían al guerrero más poderoso"

"El ADN de Shisui, Itachi, Madara crearían al mejor Uchiha nunca antes visto"

"Los ADN que logré obtener en todos estos años para experimentar, se encuentran escondidos en xxx"

Era una parte de lo que decían aquellas notas, al principio pensó sumar el ADN de Sarada Uchiha, ya que lo tenía y creía que mejoraría al nuevo ser, pero leyendo más se dio cuenta de que el ADN de una Uchiha mestiza, con malos genes como lo fueron los Haruno en su visión, sólo podría empeorar a la creación.

Pasaron los años y pudo crear a ambos guerreros, los entrenó, educó, los cuido y cuando se dio cuenta que era demasiado viejo, creó a un robot, dando las indicaciones de lo que debe hacer, así, muriendo en paz, esperanzado en que con ellos, el mundo ninja desaparecería al fin y naciera una nueva era, sin ninjas, sin chakra, y sobre todo, sin Guerras.

—Así es, Kuro-kun -respondió una linda mujer de cabello Plata y ojos rojos- Han terminado su misión, ¿No están felices?

—No, Nanami-san -contestó un chico rubio, con ojos cual zafiro- si terminamos quiere decir que...

—Exactamente Yuki-chan -habló con tranquilidad en su voz- Pero tranquilos, pueden descansar unos días ¿De acuerdo? Solo deben cuidarse de los animales salvajes, ya que los muertos no podrán hacerles nada -decía mientras miraba a su alrededor, donde habían cientos de cadáveres, tanto de criminales como inocentes.

—Vámonos, Kurosaki -arrastró a su primer y único amigo, con notable tristreza en su rostro.

—¿Qué sucede, Yukiteru? -preguntó curioso, nunca había visto tan triste a su amigo.

—Nada, todo está bien ¿De acuerdo? Solo estoy cansado por todo...

—Ven precioso -dijo sin vergüenza en su voz, atrayendo a su amigo en un abrazo, repartiendo besos por su rostro- ¿Vamos a casa, si? -con ayuda del kamui, aparecieron en la habitación del azabache.

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