Love After dead

Capitulo V

Enredado en las sábanas de mi cama saco la cabeza - Mierda, otra vez me cogió la mañana - pienso y me paro rápidamente, me quitó la camiseta y los bóxers, y abro la puerta para ir corriendo al baño.
- Por fin se despertó mi hermoso....- mi madre Helena me mira desnudo - HIJO!!!! - lo primero que hago es taparme con las manos, ¿Carajo por que a mi? ¿Justo hoy?
- Mama cálmate, y déjame pasar - digo esto al verla llorando, exagerada como siempre
- Es que ya creciste, son cuantos hoy!? - dice secándose las lágrimas
- 18 mama... - digo incómodo, esta en la mitad del pasillo y no me quiere dejar pasar, sólo ruego que mi hermanita este en el colegio...
- 18... - dice y suelta una sonrisa - bueno mi pequeño de 18 - me abre campo y por fin puedo caminar al baño - te espero con tu desayuno abajo!!!! - grita y yo ya estoy en la ducha bajo el chorro de agua tibia, me encanta durar cinco minutos o más debajo de esta antes de bañarme, lastimosamente hoy no puedo por que ya he perdido dos clases en la universidad.
Salgo del baño y me alisto en tiempo récord, busco mis tennis y me abro paso a la sala donde me espera el supuesto desayuno sorpresa (Huevos con tocino y panqueques).
- Adivina que te prepare de desayuno!!!? - dice mi madre emocionada
- uy mama la verdad no se me ocurre nada - digo, soy bueno mintiendo, y más desde los cuatro años cuando este es mi desayuno anual de sorpresa, pero aunque sea el mismo, y sea horrible, lo hace con cariño, igual que todo lo que ha hecho por mi hermana y por mi, y más desde que mi padre falleció. Pero la miro y veo esa alegría y amor que tiene en los ojos ante cualquier problema o dificultad y con su sonrisa me responde:
- Sannndwchessss!! - contesta y me quedo boquiabierto. - Jaja mentira es huevo con tocino y panqueques. - suelto una carcajada y me siento en la mesa a comer con mi vieja.
- Mama, imagínate que tuve un sueño muy raro - digo metiéndome el primer bocado de panqueque.
-¿ y eso mijo? ¿Que soñaste?
- Soñé que era un viejo de 80 años, que era millonario y que tenía mi propia empresa.
- Antonio de pronto es tu futuro...
- o mi pasado - digo serio y ella me mira raro
- Termina el desayuno y déjate de bobadas, anciano. - dice, sonríe y se levanta de la mesa.
Al quedarme sólo con mi desayuno sigo pensando en el sueño, se veía tan real!, que me hubiera gustado seguir durmiendo para ver que sucedía; de repente me acuerdo que me despertó.
- Chao mama!! Me voy a la universidad! - no dejo que ella se despida de mi pues ya voy corriendo a agarrar el metro para ir a la clase de la 1.
Como raro este esta lleno, agarro las fuerzas que tengo y me meto a la maldita sea, y para mi suerte hay un puesto libre, voy hacia el, y cuando me voy a sentar me lo gana un hombre robusto y serio.
- señor yo me iba a sentar ahí - digo con todo el respeto del mundo.
- muy bien dicho, ibas, por que ya no. - dice y se ríe, me quedo serio y agarrado de la baranda me sostengo de pie mirando al gordo asqueroso.
Cuando veo que falta una estación para bajarme, saco un jugo de Mora de mi maleta "ya verás como te queda esa camisa blanca después de esto gordo repugnante" pienso y lo abro, y apenas el metro frena se lo hecho todo en la camiseta y salgo a correr a la plataforma.
- Te voy a matar! - grita el gordo desde la ventanilla del metro
- Ibas, porque ya me voy! - grito y salgo corriendo a la calle para pasar a la universidad.
Llego riendo de sólo pensar la cara del asqueroso, de repente dejo de correr al ver a la hermosa de Paula, como está de buena esa mujer, cabello largo de color negro, piel blanca y labios carnosos, un cuerpo que parece hecho por los mismísimos dioses y una sonrisa perfecta.
- ¡¡¡Feliz cumpleaños Antonio!!! - Me gritan Lina, Vanessa y Katherine, carajo.
- ¡Gracias Princesas! - digo guiñiendoles el ojo derecho a lo que ellas sonríen.
- y.. Que vas a hacer hoy? - dice katherine mostrándome su escote.
- debes estar muy ocupado hoy no?... - dice lina golpeandome ligeramente el brazo y entrelazando lo con el de ella.
- Quieres ir a comer algo Antonio? - dice finalmente Vanessa mirándome fijamente.
- muchas gracias hermosas, pero ya voy tarde. - digo y voy caminando hacia mi clase - pero más tarde nos vemos vale? - digo rogando por que eso no pase.
- Bueno! Adiós antonio!! - gritan las tres en unísono.
Ay la vida del soltero... - pienso mientras me río internamente.