Capitulo 4

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-Suéltame estúpido- Dije yo con un sonrojo muy evidente.

-Y si no quiero, que harás Addams- Dijo el en un tono ronco y sexy.

-En ese caso pasara esto- Y al momento yo lo tenía acorralado contra el suelo, al final las clases de defensa personal si funcionaban.

-Eres fuerte Addams- Dijo el aparentemente sorprendido.

-Y ahora porque te dio por llamarme por mi apellido- le pregunte, algo fastidiada.

-No sé, simplemente creo que es mejor que llamarte niña, no lo crees- dijo el con un tono de superioridad.

-Tienes razón, Robinson es mejor que niño nuevo- dije yo siguiendo le la corriente.

-Ahora si podemos volver a la fiesta, no quiero preocupar a Will, o a Caleb- dije yo en forma de súplica.

-Si, vamos a volver, pero yo te llevo a tu casa- dijo el como si me estuviera dando una orden, cosa que me molesto un poquito.

-No de eso nada, ya había quedado para irme con Will y Caleb, además no sabes donde vivo- dije yo con un tono de superioridad.

- Pues tendrás que cancelar preciosa- dijo el con un tono sarcástico.

-De eso nada, no pienso cancelar nada y menos por ti- dije yo muy segura.

-Y por qué no- dijo el curioso

-Porque si, no tengo que darte explicaciones sobre mis decisiones- le dije yo algo irritada.

-Creí que ya habíamos quedado bien Addams- dijo como si le hubiera dolido lo que dije.

-Estamos bien, pero tienes que dejar de ser tan egocéntrico, posesivo y ya se olvidó todo lo demás- dije yo y solté una leve carcajada por lo último que dije.

No sé si fue por lo que dije o por la risa que solté, pero Eldrick me miro con unos ojos melancólicos, esos ojos que me hicieron ir hacia el cuándo lo conocí, aquellos ojos tan misteriosos y mágicos, que ahora estaban llenos de emociones, que no lograba interpretar, y los acompañaba la más hermosa sonrisa que jamás le había visto emitir a él, y al segundo escuche una hermosa carcajada provenir de él.

Este chico me vuelve un océano de sentimientos y eso no me está gustando.

-Prometo intentar dejar de ser tan egocéntrico, posesivo y todo lo demás que se te haya olvidado cerca tuyo- lo dijo con una sonrisa y sentí que me decía la verdad.

-Okay, te creo, pero tienes que cumplirlo- se lo dije muy directa y seria.

-Por algo te lo prometo Addams, yo no me tomo las promesas a la ligera- lo dijo decidido y con un tono que me dio la sensación de que decía la verdad.

Luego de estar en esa azotea tanto tiempo bajamos como las personas normales que somos, regresamos a la fiesta y me encontré con un Will muy preocupado por mí y por Caleb, porque no nos encontraba, y aun no lo encontraba.

-Melissa Adams, donde carajo te habías metido, estaba muy preocupado, ¿Caleb no viene contigo? – me hablaba histérico.

-Tranquilo Will, estoy bien, y Caleb no está conmigo-

Apenas termine de decir eso Caleb apareció detrás nuestro.

-Will tranquilo, solo fui al baño- dijo Caleb muy tranquilo.

-Me pegaron un susto de muerte asquerosos- al terminar esa frase empezó a pegarnos palmaditas a los dos.

- Will para, pareces un niño chiquito- dije yo riéndome de lo inocente e infantil que se había portado.

Misterios en la SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora