El último de nosotros

(Capítulo 3)

Tras la gran derrota, Naruto se encontraba esposado y montado sobre un caballo, miraba a quienes lo custodiaban a su alrededor y forzaba sus ataduras. Naruto podía ver sus características, eran muy similares a los guerreros que habitaban "El país del hierro" pero de alguna forma ellos eran diferentes, no luchaban como los guerreros que ya había visto, y sus prendas de batalla aun que similares, eran diferentes.

En estos momentos, Naruto sufría por su herida hecha en combate, que por alguna extraña razón no sanaba, algo que lo confundía de sobremanera. Se tranquilizo y vio la situación en la que se encontraba, había 500 hombres a caballo alrededor suyo, todos armados y vistiendo las mismas armaduras excepto por pequeñas diferencias entre ellas, trato de erguirse y vio a quien parecía ser su líder al frente guiándolos.

Sin saber que hacer, el rubio cerro sus ojos y entro a su subconsciente encontrándose frente a Kurama que lo veía expectante.

¡Kurama! ¡Necesito de tu ayuda! — Grito el rubio al acercarse aun mas al zorro.

— No, debes buscar otra manera de salir de esta, es muy riesgoso...

Por favor, ayudame...se las consecuencias pero prefiero tomar el riesgo — Declaró Naruto decididamente.

El zorro negó con la cabeza y dirigió su puño hacia el rubio, que al momento correspondió. Naruto asintió confiado y observo como Kurama transfería su poder hacia el.

En la realidad, el pequeño ejército continuaba con su camino hacia su hogar por las montañas, todo estaba en orden y el líder se enorgullecía de eso. Por un momento, el líder se perdió en sus pensamientos y recordó lo acontecido, al parecer, había visto en vida lo que divisó en sus visiones aun recientes.

De repente, se sobre exaltó al sentir una gran energía detrás suyo, era muy fuerte y espesa la sensación que ahora podía sentir. Miro a sus espaldas y vio como sus hombres se apartaban impresionados ante el poder del rubio a quien llevaban preso, y que ahora fácilmente rompía sus ataduras.

Sin percatarse a tiempo, Naruto recibió una patada sobre su cara haciéndolo caer del caballo, una aura roja cubrió su cuerpo al ponerse en pie y miro en dirección a los hombres que lo llevaban, pero solo se encontró frente a frente con quien era su líder, que al momento toco su pecho formando un sello instantáneamente. Naruto grito y froto su pecho ante el repentino dolor que sintió sobre el, cayo arrodillado a los pies del líder enemigo e intento levantarse sin éxito.

Intenta algo...y te matare con mis propias manos — Amenazo el líder severamente.

Naruto siguió frotando su pecho e ignoro las palabras del líder al no comprenderlas, y una vez mas, los hombres lo ataron y colocaron sobre el caballo sin resistencia alguna por su parte, se encontraba atónito por lo que acababa de suceder. Ahora, los guerreros no lo perdían de vista y mantenían su mano sobre sus espadas, todos esperaban un movimiento mas, pero el rubio parecía hipnotizado ante su nula reacción.   

¡¿Que fue lo que sucedió?! — Interrogo furioso el rubio.

— ¿Es obvio no? Ese hombre te ha colocado un sello, ahora no puedes tener acceso a tu chakra, ni al mío...— Kurama respondió sereno, aun que realmente estaba preocupado.

— ¿Qué? pero...

— Tranquilízate, chico...veremos que hacer, pero por el momento...solo queda esperar.

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