Un Aroma Dulce Como Las Uvas

CAPITULO No. 60 - Sr. Ruan ¿Quieres bailar?

No era sólo Ruan Xingshu quien esperaba con ansias el día de hoy, Chu Hezhou también lo esperaba, ¡Chu Hezhou no dejaba de pensar por que el tiempo pasaba tan lentamente! Al alfa le encantaba la sensación de que, mientras que el omega estaba deseando que llegara este día, él también estaba deseando que llegara. Chu Hezhou bajó la cabeza para profundizar su beso con Ruan Xingshu, sus dedos acariciaban suavemente las glándulas de Ruan Xingshu como si se tratara de un calmante.

"Pequeña Uva, ¿Mira mi regalo?"

La voz de Chu Hezhou se hundía, si continuaba más, no querría cenar esta noche.

Ruan Xingshu recibió un beso de Chu Hezhou con la cara completamente roja, mirando al gatito que se había subido al regazo de Chu Hezhou. Entonces levantó suavemente el gatito y las extremidades de este revolotearon en el aire, revelando cuatro almohadillas blandas de color ciruela rosa.

"¿Miauw?"

El gatito ronroneaba suavemente, sus dos grandes ojos azules miraban a Ruan Xingshu, su pequeña nariz rosada olfateaba los dedos de Ruan Xingshu.

"¿Te gusta?"

Chu Hezhou acarició a Ruan Xingshu y acariciar la nariz del gatito.

"¡Me gusta!"

Cuando Ruan Xingshu dijo que le gustaba, es porque realmente le gustó mucho, un gatito que había nacido hace poco y hasta su ronroneo era tierno y dulce.

"Es un gatito omega, tus feromonas lo harán muy estable, aún es muy pequeño para tomar leche, toma leche de cabra y dale sólo un poco de pasta de arroz después, y no le des comida para gatos todavía"

Chu Hezhou agarro el porta gatos que estaba dentro del auto y le dijo al conductor que se fuera y que viniera a recogerlo más tarde. Ruan Xingshu no pudo evitar apretar la almohadilla carnosa del gatito, era muy suave, como si no tuviera huesos.

Había una razón por la que Chu Hezhou le dio el gato a Ruan Xingshu, Chu Hezhou sentía que Ruan Xingshu era como un gatito todo el tiempo, ya sea por la forma en que se movía algunas veces o, por la mirada inconsciente en sus ojos, era como un gatito.

Ruan Xingshu metió al gatito en la maleta que llevaba Chu Hezhou y vio que el gatito bostezaba y se tumbaba obedientemente.

"¿Estará enfermo? ¿Tiene mucho sueño?"

Ruan Xingshu miró al gatito con los ojos muy abiertos.

"Los animales pequeños de uno o dos meses duerme durante mucho tiempo"

Chu Hezhou miró los ojos de Ruan Xingshu, ¡Realmente parecía un gatito! Después de entregar su regalo se dirigió a la puerta de la sala privada y vio que Ruan Xingshu se detenía de repente, con los dedos enganchados alrededor de su dedo meñique.

"Chu Hezhou, ¿Todavía no has dicho si quieres estar conmigo o no?"

El corazón de Ruan Xingshu se encontraba en un punto muerto, Chu Hezhou no le había dicho personalmente que estemos juntos, el corazón de Ruan Xingshu estaba realmente inquieto.

"¿Qué piensa, Pequeña Uva? ¿Crees que he dicho que sí o que no?"

Chu Hezhou miró pacientemente a Ruan Xingshu, ¡Este pequeño tonto! Preferiblemente, espera que lo admita el mismo.

"No estoy seguro, te gusto, ¿Verdad?"

Ruan Xingshu temía que Chu Hezhou dijera una palabra que no fuera cierta, estaba preocupado.

"Si no me gustaras, te habría cogido de la mano y habría venido caminando personalmente hasta aquí, tontito, como he dicho, no eres el único que se va a confesar esta noche, ¡Tienes que ser paciente!"