"Cuando todo padre me creo a mí y a mis hermanos y hermanas, quería que nosotros fuéramos el inició de algo grande. Quería que fuéramos el recipiente de la vida que el creó y de su poder, quería que fuéramos los encargados de cuidas a su descendencia sin olvidar en crear a la nuestra. Para nosotros la vida luego de miles de años puede llegar a ser monótona y aburrida pero hay ocasiones en donde ese no es el caso como lo que le ocurre a mi. Nuestro trabajo es cuidar el santuario que mantiene vivo a todos los hermanos y hermanas y eso es lo que planeamos hacer hasta el fin de nuestros días" - Dijo un hombre rubio con una enorme sonrisa en su rostro
"Minato ¿Puedo saber porque me cuentas esto?" - Pregunto Rea con una sonrisa divertida mientras miraba a Minato quien empezó a reírse nerviosamente
"Creo que me deje llevar" - Contesto Minato mientras se acercaba hasta Rea para sentarse al lado de ella con una sonrisa
"Ha pasado tiempo desde la última vez que vine ¿Como has estado?" - Pregunto Rea con una bella sonrisa que enamoraría a cualquiera
"No mucho la verdad, he estado cuidado el santuario como siempre además de que estaba cuidando a Helena, falta poco para que de a luz a nuestro hijo" - Contesto el con una sonrisa sin notar el ceño fruncido en la cara de Rea la cual miro al suelo
"Como...¿Como está ella...?" - Pregunto con el tono de su voz un poco apagado. Aveces...le gustaría estar en el lugar de Helena
"Ella se encuentra bien, de hecho pregunta seguido cuando irás a verla cuando nazca el bebé" - Comento el con una pequeña sonrisa
Rea solo apretó su vestido blanco un poco. Ella no iba a meter se sentía celosa de Helena y le rompía el corazón que Helena fuera la que estuviese embarazada del rubio y lo ella
Intentado dejar esos pensamientos de lado miro a Minato con una sonrisa algo forzada para luego
"Claro que lo haré. He estado ocupada últimamente pero podré verla cuando el bebé nazca" - Contesto ella a lo cual Minato le sonrió enormemente a ella
"Muchas gracias Rea, te quiero" - Le dijo con una sonrisa feliz
"(Y yo te amo)" - Pensó Rea con tristeza mientras veía a Minato
Ella lo había amado desde hace muchos años pero nunca le dijo y solo actuó como si el no le interesará cosa de la cual se arrepiente. Ella había llorado cuando supo de su relación con aquella mujer y lloro aún más cuando supo que aquella mujer que le arrebató a su rubio estaba embarazada de el
Sin duda, Minato era el único mortal que se ganó su amor
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"Creo que falta poco" - Dijo Posedeia mientras seguía caminado por este inmenso bosque
Ella estaba en todo momento con la guardia en alto ya que este lugar había anulado sus poderes, por suerte ella sabía cómo defenderse a la perfección sin la necesidad de si poder cosa que no la dejaba completamente desprotegida, lo único malo es que este lugar era completamente impredecible y no sabía qué tipo de seres se pudiera encontrar
"Espero terminar co..." - Ella en ese momento se detuvo solo para ver cómo una flecha paso muy cerca de ella para luego clavarse en el tronco de un árbol que tenía al lado
Ella rápidamente se puso en guardia al ver movimiento en los árboles que tenía alrededor
De pronto varias figuras salieron de los árboles y se le quedó mirando a estos seres