Hαвleмoѕ.

242 32 8
                                    




Otro día de clase más. Actualizando un poco acerca de todo lo que ha pasado... De haber pasado a estarme tocando con Shoto, a de la nada estar con Yaoyorozu, era más complicado aceptar como me sentía de lo que creía, y sé que deben enterarse ambos.

Había tomado la decisión de hacérselos saber,  que había estado con ambos, y, aunque sabía que como tal no debía dar explicaciones, pues con ninguno de los dos tenía algo en realidad, entendía que si quería tenerlo con alguno de ellos, debían conocer cómo me sentía y cómo me siento.

Al día siguiente de lo ocurrido con Momo, me topé con Todoroki fuera de mi habitación.

- Oh, disculpa no te ví..

- No es problema, es solo que.. - el volteo a ver a ambos lados. - Te extrañé.

Entró a mí habitación y tomó mi cara para besarme.

- ¿Me extrañaste? - reí levemente.- Nos vimos ayer.

- Es verdad. - sonrió. - Pero aún así, se ha vuelto una costumbre verte y estar a lado tuyo.

- No sé si eso sea completamente bueno - Reímos. -

En un acto repentino él me abrazó poniendo su rostro en mi cuello. Comenzaba a creer en que él realmente me gustaba por como sentía mi corazón acelerarse en ese instante.

- Hey... ¿Ocurre algo?

Coloqué mi mano en su cabello, jugando con este. Todoroki simplemente suspiró, no quería obligarlo a hablar de algo que no quería así que decidí no insistir con eso.

- Oye Todoroki.. ¿En serio el cabello de todo tu cuerpo es blanco y rojo..?

Él soltó una ligera risa.
Era cierto que nos habíamos tocado, especificando más habían sido cuatro veces, la primera fué en su habitación aquel sábado. Pese a la emoción del momento nos tocamos bajo las sábanas de su cama, y las siguientes veces transcurrieron por la noche, así que genuinamente no tenía la certeza de que en serio todo su cuerpo fuera mitad rojizo y mitad blanco.

- ¿Sabes? Kaminari me llegó a hacer la misma pregunta..

Solté una carcajada. - ¿En serio? Quisiera decir que me sorprende

- Lo único diferente es que, en aquella ocasión solo lo miré y asentí

- Ajá, ¿Y en esta?

- En está yo te respondo con otra pregunta..

- Oh, no diré nada al  respecto de eso. - Sonreí. - Dime

- ¿Quieres averiguar si es cierto?

- Todoroki - Sonreí con vergüenza. - ¿Esa es tu manera de... - Reí.-

Todoroki se sentó en mi cama mientras yo me asomé por la puerta buscando rastro de alguna persona por el pasillo, al ver que no había nadie cerré esta.

- Sé qué quizá es mucho pedir pero.. - Suspiró.- ¿Podrías...? Ahm..

Logré divisar un pequeño rubor sobre sus mejillas. Él era muy directo, así que me sorprendió que le costará hacer su petición, aunque.. ¿Era está una señal de que yo le gustaba? ¿O solo era la vergüenza de decirlo?

- ¿Podrías darme una mamada...?

Como si esas fueran las palabras mágicas, un bulto se asomó por su pantalón haciendo que me cuestionara si es que acaso él podía pararlo a voluntad. Poco después de procesar la situación, simplemente me arrodillé y al mirarlo a los ojos metí delicadamente mi mano zurda a su pantalón holgado.

- Mmgh...

Al tocar su miembro primero quise distinguir su forma con solo el tacto de mi mano, por lo que la moví desde el tronco hacia el glande. La idea que me dio aquella acción de como era fue más consistente, en comparación a las otras veces que lo había tocado sin notar ciertas cosas; como su grosor.

Luego de eso, liberé su erección de la tela de su bóxer y posteriormente de su pantalón, para empezar aquella acción masturbandolo.

Me miró con una intensidad que me hacía sentir algo de intimidación, sus jadeos eran de un tono grave que me gustaba mucho, pero lo que me cautivaba de él era cómo de un momento a otro sus gemidos elevaban su agudeza.  Honestamente, más allá de ciertos libros que había leído en mi exploración, yo no tenía mucha practica de cómo hacer un oral; únicamente tenía conocimientos básicos, como no vomitarle encima, por lo que luego de tocarlo comencé a lubricar su glande con mi saliva, utilizando mi lengua y sumergiendo aquella parte sensible de su pene en mi boca. 

Al ver que esto parecía dar en el clavo con la satisfacción del chico, seguí bajando poco a poco mi boca adentrando su miembro, hasta llegar al fondo sin lastimarme. La parte que no podía alcanzar por completo con mi boca era estimulada con mi zurda, mientras que mi diestra se encargaba de sus bolas.

Continué, hasta el punto en el que Todoroki no pudo cubrir sus gemidos y se corrió en mis labios. 









( ••• )







Terminando las primeras clases, en la pausa de receso me acerqué a Todoroki. Esperé a que Momo se adelantara, me preocupaba un poco que se sentarán tan cerca.

Quería confrontar mis sentimientos, hablar primero con él para explicarle lo que había pasado, confirmar qué éramos y quizá conseguir algún tipo de apoyo por su parte para ayudarme a entender qué era lo que me sucedía.

- Todoroki-Kun..

- ¿Sí?

- ¿Te parece si hablamos..? - Miré al profesor Aizawa que aún se encontraba ahí. -

Él observó en dirección a lo que veía y asintió; salimos del salón y fuimos a un pasillo en dónde no parecía haber nadie.

- Necesito decir...

Mis palabras fueron interrumpidas cuando aquel chico se abalanzó sobre mis belfos para callarme con una especie de beso sin ataduras.

Esto no era lo que tenía planeado ni de cerca, pero tampoco me molestaba. De todas formas, debía decirle antes de que se me saliera de las manos.

- Espera..

- ¿Te lastimé? - preguntó con duda. -

- No es eso, es que, en serio necesito hablar contigo.

- Ah, pensé que había sido solo una excusa para... - Hizo una pausa. - Discúlpame, dime

- Todoroki.. ¿Qué se supone que hacemos?

- No te entiendo.

- ¿Sólo nos... tocamos y ya? Tengo algunas preguntas que me gustaría dieras respuesta.

Tenía sus ojos atentos sobre mi. Ahora sentía demasiada confusión, él me atraía, claramente era muy atractivo, tan sereno y su delicadeza al tocarme era lo que más me gustaba. Pero, también me sentía así por Momo, por su carisma, su torpeza al tratarme y su belleza tanto interior como exterior.
¿Era acaso que debía elegir entre uno de ellos?

Todoroki siempre fue muy atento conmigo, siempre me escuchaba cuando quería hablarle de algo, compartíamos muchos gustos, me trataba bien en cada momento; discreto, educado y siempre muy cariñoso. Cualquiera diría que sería el novio perfecto, y claramente era cierto que también tenía la cualidad de la versatilidad. 

Realmente me importa tanto él, que en este momento me daba miedo que estuviera tardando en contestar mi pregunta. Su demora me aterraba, posiblemente sentía miedo porque sabía que me entristecería si me dijera que en todo este tiempo, jamás fuimos algo.
Sin embargo, de serlo ¿Qué significaba que yo me hubiera acercado a Yaoyorozu? ¿Acaso yo le fui infiel? 

- ¿Todoroki

- Creo que me gustas. - Respondió. -












Pᴏʟɪᴀᴍᴏʀ | Tᴏᴅᴏʀᴏᴋɪ﹐ Mᴏᴍᴏ ﹠ RᴇᴀᴅᴇʀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora