𝑷𝒆𝒕𝒆𝒓 𝑴𝒂𝒙𝒊𝒎𝒐𝒇𝒇»»-𝓞𝓷𝓮 𝓢𝓱𝓸𝓽𝓼--««

━𝐓𝐇𝐀𝐓 𝐏𝐋𝐀𝐒𝐓𝐈𝐂

𝐜𝐨𝐧𝐭𝐞𝐧𝐢𝐝𝐨 𝐬𝐞𝐱𝐮𝐚𝐥

― Ps..  ― escuchó la chica tras suyo, a la misma vez que le tiraban una bolita de papel.

Confundida miro hacia esa dirección, encontrándose con un platinado que modulaba con la boca; Doce. Ella rodó los ojos y siguió haciendo su examen. Pero otro papelito lanzado a su dirección la distrajo. Miro de nuevo a Peter y el volvió a modular aquel número.

Ella sabía que si lo volvía a ignorar o le decía que no, él iba a seguir insistiendo. Entonces no le quedó otra opción que escribir la repuesta, en un trozo de papel.

Igual ella se lo iba a dar de todas maneras porque tenía un pequeño, bueno no tan pequeño enamoramiento hacía ese platinado. Al igual que le escritore y le lectore de este fanfic.

Cuando Marisol estaba entregando el papelito a su compañero de alado, así comenzaba una cadena de pasar aquel papelito hasta llegar a su amado, una persona se interpuso en su campo de visión. La chica de pelo azulado trago grueso.

― Me puede entregar el papelito, señorita Rodríguez ― más como una pregunta se escuchó como una órden.

Marisol se puso nerviosa. Si el profesor se enteraba lo que decía aquel papelito, ella al igual que Peter, les sacarían sus exámenes y serían castigados, quien sabe cuánto tiempo.

Sabía las consecuencias que ocurrirían después de lo que haría a continuación. Pero no le importo. A velocidad veloz, se puso el pelito en la boca y se lo trago. Un rotundo silenció se estacionó en el salón, para luego irse siendo suspendido por las risas y carcajadas de todxs en el salón.

― Castigada esta tarde después de clases  ― sin decir alguna palabra más se fue a sentar tras su escritorio, de mientras que le decía a todxs que guardarán silenció.

Marisol miro enfurecida a Peter y él solo le regaló una pequeña sonrisa.

(...)

La peli azulada volvió a estornudar, a causa de su alergia al polvo. Limpiar todo el salón no era el mejor castigo para alguien con esas alergias.

Unas manos en su cintura la hicieron sobresaltar. Enseguida con su mutación hizo un campo de fuerza, a consecuencia su "atacante" salió disparado chocando, en un golpe seco, contra la pared. Marisol se dio la vuelta y paledesio al ver de quién se trataba, nada más y nada menos que Peter Maximoff.

Preocupada corrió asía él. Al ver qué se encontraba solo un poco atontado, largó un suspiro.

― Gracias al universo, que te encuentras bien ― lo ayudo a levantarse y lo sentó en una silla ―. Me diste un gran susto - susurro, mientras que revisaba su cara.

― Estoy bien, estoy bien ― la intento tranquilizar y beso la palma de la mano de la chica, que se encontraba agarrando su mejilla.

Ella le sonrió y le dio un casto beso y se alejó, para seguir limpiando. Pero Peter, por obvias razones, fue más rápido y la agarró de las caderas.

― Otro ― pidio con un puchero en sus labios.

Marisol, rodó los ojos y le dio otro beso. Ella al alegarse, Peter, le arrebato otro beso y ella se lo devolvió, y asía fueron tres besos más hasta que se volvió un beso más largo. El platino la atrajo más, asiendo que se siente ahorcadas de él. Ella lo agarro de la nuca profundizando el beso y él comenzó a acariciarle la espalda, por abajo del buzo.

Inconscientemente comenzó a mover sus caderas, haciendo fricción sus partes íntimas, que estaban cubiertas por sus ropas. Peter bajó sus manos y las adentro, por la pollera de la chica, para comenzar a masajear y apretar sus glúteos. Al igual que bajó sus besos, mordiendo y lamiendo el punto dulce del cuello de ella.