✧꙳𝙵𝚘𝚛𝚋𝚒𝚍𝚍𝚎𝚗꙳✧ 「𝙼𝙸𝙽𝚂𝚄𝙽𝙶」

18

El lunes por la mañana, Minho llegó con muy buen humor, sonriendo más de lo normal y radiante a pesar del ambiente tan tenso que siempre reinaba en su casa debido a sus padres. Dejó de lado toda su situación familiar y decidió prestarle atención a su relación con Jisung; recordar los eventos sucedidos en la fiesta lo hacían sonrojarse fuertemente, orgulloso de sí mismo por haber apartado esas inseguridades que lo limitaban. Se sentía mucho más libre, sus amigos ya sabían sobre lo que estaba pasando con Jisungㅡa excepción de Seungminㅡy Soobin también, por lo que la carga emocional que antes tenía, había desaparecido en su mayoría.

Tenía motivos para estar tan feliz.

ㅡ¡Buenos días, Changbin!ㅡlo saludó con alegría, poniendo la mochila sobre su mesa, tomando asiento.

ㅡ¿Por qué tan feliz?ㅡenarcó una ceja, mirándolo con sospecha.

Minho se encogió de hombros sin dejar de sonreír, evitándose dar explicaciones; sacó los libros pertenecientes a la clase que estaba a punto de empezar y se limitó a escuchar la corta historia de como estuvo el fin de semana de su amigo.

Jeongin apareció más serio de lo usual unos minutos después, un poco más tarde de lo que normalmente llegaba, de hecho, de los cuatro, Jeongin era el que más puntual y más  animado solía estar, sin embargo, ese día había llegado con un aura muy notoria totalmente gris a su alrededor, saludando en voz baja antes de tomar asiento en su silla que estaba ubicada unos asientos más adelante bajo la atenta mirada de sus amigos.

Puso el celular en el centro de su mesa, mordiendo su labio inferior con duda, leyendo repetidas veces los mensajes de insistencia que Hyunjin le había enviado esa mañana que no había respondido. Honestamente, no quería responderle a pesar de que se sentía muy tentado a hacerlo; desde el sábado por la mañana que había estado respondiéndole un tanto cortante hasta que empezó a ignorarlo totalmente. ¿La razón? No quería ilusionarse más de lo que ya estaba ni salir lastimado, suficiente tenía con haber aceptado su aparente atracción hacia el mayor a sabiendas de que estaba mal sentirse de esa manera hacia un chico. Suspiró sonoramente, bloqueando la pantalla de su celular para guardarlo al fondo de su mochila en un intento de olvidarse por un momento de eso, tenía la esperanza de que las clases lo distrajeran lo suficiente para no seguir lamentándose tan ridículamente por haber sido rechazado sin siquiera haber intentado algo.

ㅡInnie, ¿estás bien?ㅡMinho se acercó a sus espaldas junto a Changbin, captando rápidamente su atención.

ㅡClaroㅡasintió, forzando una pequeña sonrisa que no tranquilizó para nada al castañoㅡSolo estoy un poco cansado.

ㅡHabla con nosotros, tal vez te sientas mejor si nos cuentasㅡobviamente no le creyó, lo conocía lo suficiente para saber que no solo estaba cansado.

Jeongin agachó la mirada al escuchar la manera tan amable en la que Minho le hablaba, dándole siempre esa confianza para hablar sobre sus problemas.

Se sintió mal por un momento, muchas veces envidió a Minho, todo inició cuando lo escuchó hablar tan decidido en cuanto a sus ideales, importándole poco lo que ellos pudieran decirle, porque él sí estaba decidido a hacer un cambio significativo en su vida, en cambio, Jeongin se sentía demasiado cobarde, huyendo siempre de las cosas que lo preocupaban. Y en ese momento, lo envidiaba porque fue capaz de arriesgarse con Jisung y él no era ni siquiera capaz de enfrentar a Hyunjin con sus sentimientos, quedándose en la sombra siempre. Detestaba tener esos pensamientos sobre Minho, nunca le hizo nada malo, siempre estuvo con ellos a pesar de que muchas veces lo criticaron por su manera tan diferente de pensar.

No merecía ni siquiera ser su amigo.

ㅡQuiero estar soloㅡdijo sin mirarlos, sacando en silencio los libros al mismo tiempo que la campana que anunciaba el inicio de clases sonó, dándole paso a la jornada educativa.