《27》

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-"siempre fuiste poco tolerante al alcohol t/n" dijo Akane viéndote dormida en la cama

-"al final si tuve que venir" dijo Keishin detrás de ti

-"llegaste, pero que sepas que se quedará conmigo" dijo yendo más a tu lado

-"a si, como no" dijo rodando los ojos

-"no es una broma, ella quería quedarse, se quedará en mi casa hoy" dijo sonriente con superioridad

-"ya quisieras ¡dámela!"

Y así empezaron a estirarte los dos de ambos brazos tratando de quedarse contigo

-"¡no soy un juguete la puta madre!" Gritaste soltandote de su agarre aún borracha

-"a ver, ¿con quién quieres ir?" Dijo Akane de brazos cruzados

-"¡con Keikai!" Dijiste yendo frente a el abrazandolo

El se sonrojó por qué hace mucho no lo llamabas así

-"solo borracha te prefiere" dijo con sorna Akane

-"al menos yo si estoy con ella" dijo tomando tu mano

Empezó a cruzar la casa de Ryū para llegar a la salida

Te subió al auto y te dormiste de nuevo

[...]

-"vaya... que suave" decías acariciando lo que parecía ser tela

Una tela que te resultó familiar, sin mencionar el aroma

Levantaste la vista viendo a Keishin totalmente dormido mientras te abrazaba

Estabas dormida encima de el, una posición que ambos pusieron en práctica un par de semanas después de empezar a salir

Y que ambos les resultaba absolutamente cómoda y reconfortante

Se habían acostumbrado tanto a esa posición que cuando te levantabas primero que el siempre se despertaba después por no sentir tu peso encima de el

Le resulta cómodo dormir contigo arriba

-"Kei" dijiste acariciando sus pestañas

El suave tono que usaste vasto para que abriera los ojos con lentitud y sonriera al verte

-"hola cariño" dijo para posar su mano en tu mejilla

Con tu mano apegaste más la suya a tu cara disfrutando del tacto mientras cerrabas los ojos

Eso le dio una gran calidez a Keishin y te abrazo

-"desearia no tener que ir a trabajar" dijo besando tu coronilla

-"de igual forma siempre te acompaño a la tienda" dijiste con los ojos aún cerrados

-"¿no te duele la cabeza?" Pregunto acariciando dicha zona

-"un poco, pero estar cerca de ti lo calma mucho, como cuando tengo mi periodo"

-"si... nunca te me despegas, aunque no me disgusta"

Acaricio tu espalda semidesnuda debido a la remera de tirantes y la palmeo para que salieras de encima de el

Consideraba que decírtelo directamente sonaba ofensivo

Te levantaste de a poco, pero te quedaste sentada en su pelvis mirándo cada parte de el que podías apreciar

El ya estaba acostumbrado, siempre lo hacías

Lo que no esperaba era que metieras tus frías manos dentro de su camiseta

-"¡ek! ¡t/n, están frías!" Dijo mientras salías corriendo del cuarto

legalidad conseguida (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora