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El camino a casa fue de todo menos silencioso con Hu Tao, Childe y ahora Venti en el carro. Rápidamente Venti logró llevarse bien con los otros dos mientras que Xiao y Ganyu se quedaban en silencio.

Según Xiao, Venti tenía la habilidad de agradarle a los demás sin siquiera intentarlo, y ese momento solo lo comprobó aún más que antes.

Al llegar a su casa, Venti casi se iba a otro lado con Hu Tao y Childe, pero Xiao lo llevó de la mano a su cuarto antes de que se desviara.

—tú mano está calientita— dijo Venti aferrándose a esta. Xiao se puso rojo de la vergüenza pero no quería soltarlo.

Era un sentimiento tan nuevo pero conocido a la vez.

—lo siento— Xiao se alejó tratando de calmar su sonrojo. Venti solo se rió un poco aunque también estaba claramente sonrojado.

—oye Xiao— este lo volteó a ver, —ya que es viernes, ¿te parece si vamos a una fiesta más tarde?—.

Xiao solo se quedó en silencio mirándole seriamente, se notaba claramente que no quería ir pero cuando Venti dijo que no fueran Xiao insistió en que sí.

Hicieron la tarea y luego se cambiaron para salir. Como Venti solo traía el uniforme Xiao te tuvo que prestar algo.

—tú closet es tan— pausó —negro—.

Y no mentía, el 90% del closet de Xiao era negro, el resto era blanco o gris. Venti se decidió por ponerse una playera blanca muy simple con unos pantalones sueltos de color negro. Mientras que Xiao se fue todo de negro; una playera negra lisa con unos jeans negros pegados.

Childe dijo que el los podía llevar y recoger sin ningún problema.

El lugar de la fiesta era una casa bastante grande, bueno más bien en el gran jardín.

—¡esta es la casa de Kaeya Alberich!— señaló la casa con sus brazos, haciendo una clase de presentación, —él es quien hace las mejores fiestas—.

Xiao se veía nervioso, pues claro, muy apenas salía de su casa para la ir a la escuela.

—oye— dijo Venti, notando sus nervios —no pasa nada, podemos regresarnos a tú casa— lo tomó de la mano intentando que se tranquilizara, pero Xiao nuevamente insistió en ir a la fiesta.

Así que se dirigieron al patio, Xiao estaba aferrado a no soltar a Venti, le tranquilizaba saber que Venti estaría a su lado en una experiencia nueva.

Y vaya que todo era nuevo.

Gritos, alcohol, cigarros.

Claro que había visto a alguien hacer cada una de esas cosas, pero en una fiesta y gente de su edad haciendo cosas que no deberían le parecía completamente nuevo.

Se tensó al ver la enorme cantidad de gente de la que pensaba, Venti se dio cuenta de esto así que acarició su mano con su dedo pulgar.

—oye tranquilo, no te dejaré solo—.

another life ▪︎ xiaoven [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora