PREFACIO

560 26 21
                                    

Kjadilla 4 años

Corro asustada y me oculto detrás del escaparate en el que está la ropa y las cosas bonitas que se compra cuando los hombres malos vienen, mientas mi mami viene a buscarme

Hace unos días unos señores malos vinieron por mi hermanito, no entiendo lo que pasa pero se que debo hacerme bolita y quedarme callada no quiero que me lleven.

Mamá es mala pero cuando los hombres malos vienen le dan dinero y ella nos daba algo de comer antes de irse y dejarnos solos.

Extraño a mi hermanito, era mi única compañía y me enoja no ser grande y no haberlo protegido, ahora se que nunca más lo voy a volver a ver y todo es por mi culpa, por ser pequeña y débil.

Siento las ya muy conocidas lágrimas correr por mis cachetes y ahogó los sollozos que quieren salir de mi cuando lo recuerdo.

Debo estar callada si me escucha me va a encontrar.

Mami me dijo que mi hermano era un demonio por eso no debía quedarse con nosotras, pero el era bueno nunca lloraba y cuando lo acostaba en el pequeño colchón que la vecina me regaló el me sonreía, era lo único bonito que tenía.

- kjadilla ven aquí ahora, te tengo un regalo.

No le creo, ella siempre miente tal vez si me encojo un poco más no me encuentre.

- nena vamos miras que iremos a comprarte ropa nueva y zapatos - sigue diciendo pero no le creo - si eres buena podrás ver tu hermano.

Lo intimo capta por completo mi atención, ella sabe que lo extraño. Tal vez ya lo va a ir a buscar.

Con ese pensamiento salgo de mi escondite despacio y me acerco mientras seco mis lágrimas y trato de limpiar mis manos en el vestido que tengo puesto, es viejito pero aún me queda.

- mami - gimoteo - mi hermanito está bien?

- claro que lo está - se acerca y con un pañuelo limpia mi carita - y ahora tu también lo estarás, solo debes ser buena de acuerdo? - asiento mientras dejo que me limpie y peine.

Después de unos minutos ya estoy bonita y con mami vamos caminando hacia el almacén que hay cerca de su trabajo, mis ojos no pueden creer que sea cierto y que mami se halla vuelto buena y me esté comprando ropa y zapatos bonitos que no me aprietan ni lastiman mis pies.

Después de un rato estoy frente a un espejo muy grande con un vestido que parece de princesa, medias con listón y unas zapatillas blancas bonitas con lacitos rosados.

Mami me peino, por primera vez lo hizo, dos coletas que están apretadas y me duelen un poquito pero no les presto atención, ella se está esforzando y debo ser buena para que ahora sea así siempre.

Saca un tarrito sin color de su bolso y me rocía un poco de algo que huele rico, ahora soy bonita y estoy limpia, hasta me compro calzoncitos.

Doy vueltas jugando con el borde del vestido, me siento muy feliz, mami toma mi mano y nos despedimos de la señora que nos ayudó, cruzamos la calle y mis tripas suenan cuando el olor a pollo llega a mi nariz.

Sin evitarlo llevo mi mano y froto para que mi barriguita se calme y que nadie me escuche, pero me alegro más cuando mami nos adentra y me ayuda a sentarme en una silla y pide mucha comida, me gustaría que mi hermanito estuviera conmigo pero mami dijo que si soy buena lo veré.

Como con cuidado de no ensuciarme y cuando estoy llena ayudo a mami a recoger lo que quedó, se que hoy comí mucho pero de pronto mañana no tenga nada para llevarme a la boca y es mejor guardar.

KJADILLA: Perversa +21 ( Mafias Y Legados 2.5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora