Miré por la ventana del avión fascinada, no me podía creer que mis sueños se estaban haciendo realidad. Era realmente mágico e irreal.
¿Qué probabilidad había de que me aceptaran en BigHit? Exacto, una de un millón.
Mi mejor amiga, Melody, tocó mi hombro haciéndome salir del trance en el que estaba.
—Hey Thamy ¿Estás bien? Ya estamos llegando a Corea—Dijo con una sonrisa de oreja a oreja— Por fin.
Sonreí divertida y asentí.—En una hora estaremos en la octava maravilla, BigHit —Bromeé y mi amiga comenzó a reír.
Llegamos al aeropuerto y fuimos a buscar nuestro equipaje, era muy complicado guiarse con las señales ya que nuestro coreano aún no era tan bueno, pero no iba a ser un problema ya que lo ibamos a trabajar poco a poco.
—¡Thamy! ¡Thamy! —Gritó Mel— ¡Espabila!
¡Tu equipaje está apunto de irse!Alarmada empecé a correr tratando de alcanzar mi equipaje en la cinta.
Dios, que vergüenza estaba pasando ahora mismo, muchos de los pasajeros que habían abarcado el mismo avión que yo hace unos minutos me miraron, algunos se reían porque les parecía una escena diverida y otros simplemente habrían pensado que estaba loca.
—Oye ¿Tanto te costaba hacerme el favor de haber ido cuando viste las maletas? —Fingí molestia y ella solo me enseñó el dedo corazón sorprendiendo a varias señoras de al rededor.—
—Estamos en Corea, no en nuestro barrio, ubícate por favor. —La miré de arriba hacia abajo fulminante.—
Así nos llevábamos, una amistad de infancia y años. Gracias a ella llegué a considerar hacer el casting para ser K-idol, gracias a ella estoy donde estoy ahora mismo, gracias a ella soy quien soy.
La miré melancólica y ella me hablaba emocionada sobre cómo iba a ser nuestra estancia en la empresa, en si nos ibamos a encontrar a BTS, en si ibamos a tener la oportunidad de conocerlos...
—No puedo Mel, estoy muy nerviosa me sudan las manos. —Agité estas para calmarme un poco y miré a los alrededores en busca del cartel con nuestros nombres.— Busca letras castellanas con nuestros nombres.
Me puse de puntillas ya que no veía un carajo con toda la gente que pasaba por enfrente y a lo lejos vi a un señor no tan mayor sosteniendo un cartel amarillo que captó mi atención.—
—¡Ahí! —Alzamos los brazos para que él nos viera ya que tenía la mirada en otra zona buscándonos.— ¡Ajhussi!
El señor nos sonrió bastante sereno junto con una reverencia para saludarnos y nos guió hasta el auto.
—No me puedo creer que estemos en esta furgoneta, tiaza, es LA FURGONETA. —Miré a Mel tapandome la boca de la emoción.—
—Pues yo no sé que me pone más nerviosa, osea, no sé qué pensar. —Melody no era capaz de armar una frase bien hecha , era poco profesional querer estar ahí solo por BTS, pero ¿quién en su sano juicio podría pasarlo por alto?—
Melody y yo nos quedamos dormidas durante el trayecto, fueron unas dos horas muy tranquilas y no hicimos ninguna pausa para comprar comida o ir al baño. Estábamos completamente fritas, lo peor es que cuando empecemos las prácticas será un no parar extremo.
Sentí como se apagaba el motor del coche y me desperté estirándome un poco, mis huesos sonaron de manera satisfactoria y me bajé del automóvil . No sentía las piernas de haber pasado horas sentada en una misma posición.
—Oh por Dios, me duele todo.—Me quejé golpeando mi hombro.—
—A mí sí que me duele el hombro. Para tener veinte años estoy un poco oxidada. —Dijo Mel tratando de hacer que su cuello sonara.—