[Lᥲᥕrᥙsso] Eᥣ dιᥲrιo qᥙᥱ ᥣo ᥱmρᥱzó todo

《4》

Al día siguiente de su primera clase en Cobra Kai, su padre le preguntó que tal le había ido, Sam le contó emocionada que le había encantado, Daniel se alegró por su hija y le dijo que si quería podía seguir yendo y Sam le agradeció feliz.
Habían pasado dos semanas en las que los Viernes Sam iba al dojo.

Era Viernes y el padre de Sam la estaba llevando a la escuela.
- ¿Hoy es tu cuarta clase?- le preguntó Daniel
- Sí, no te preocupes por llevarme, puedo pedir un auto
Daniel solo le asintió, había olvidado lo rápido que había crecido su hija.
- ¿Sabes cuándo debo ir a pagar las clases?- le preguntó girando a la calle donde estaba la escuela de Sam
- La próxima semana, pero puedes darme el dinero y yo se lo daré al sensei, no debes ir hasta haya solo para pagar- lo trató de convencer Sam
- Creo que sería lo mejor, el trabajo me ha mantenido muy ocupado estos últimos días- dijo mientras detenía el auto para que Sam se bajara- la próxima semana te daré el dinero
Sam solo asintió mientras se despedía de su papá bajando del auto entrando a la escuela.

°°°

En la tarde Sam llegó al dojo y fue hasta donde estaban Robby y Miguel.
Después de los entrenamientos iban por pizza y hablaban sobre como saber más del pasado de Johnny y Daniel, pero aún no llegaban a tener un plan consiso.

Después de hablar por un rato mientras calentaban, Robby vio a Miguel y éste lo miró sin entender, hasta que pareció que recordaba algo.
- ¡Es cierto!- dijo mientras iba a la parte de atrás del dojo, al cuarto donde guardaban las cosas para entrenar

Miguel salió con una prenda blanca.
- Como ya eres una Cobra Kai oficial debes tener tu uniforme- dijo dándole la prenda a Sam
Sam la tomó y la extendió, viendo el gi blanco con el logo de la cobra.
- Muchas gracias, chicos- dijo con una sonrisa- iré a cambiarme
Fue hasta un pequeño baño que había en el lugar con su mochila para cambiarse y guardar la ropa que traía.

Después de unos minutos Sam salió con el gi puesto. Se acercó a los chicos y hablaron un poco más antes de que Johnny saliera de su oficina para empezar la clase.
Entrenaron haciendo diferentes movimientos de karate que les enseñaba Johnny, después les dijo que hicieran un círculo, puso a algunos a pelear, los últimos en pasar fueron Robby y Miguel.

Robby cayó al suelo siendo Miguel el ganador. Miguel fue hasta Robby y le ayudó a pararse.
- ¿Jamás me dejarás ganar?- bromeó Robby
- Podrías entrenar más- lo molestó Miguel
- Aunque entrene más, siempre serás el mejor- le dijo Robby con una sonrisa que hizo que Miguel desviará la mirada un momento
Johnny dio por finalizada la clase y volvió a su oficina.

Los demás alumnos ya se habían ido, los chicos se cambiaron su gi y se quedaron hablando un poco, después de un rato la conversación pasó al asunto de Daniel y Johnny.
- Debemos idear un plan para hacer que se vuelvan a encontrar- dijo Miguel pensando en alguna buena idea

Robby y Sam pensaron un poco la idea de Miguel y creyeron que podría servir.
- ¿Vamos por pizza y lo planeamos?- les preguntó Sam, pero antes de que alguno de ellos dijera algo se escuchó una voz en la entrada del dojo
- ¿Sam?
La chica se volteó y vio a quien menos se esperaba.

°°°

Daniel había salido temprano del trabajo y decidió que sería buena idea ir al dojo de su hija para poder pagar las clases por adelantado, pues se conocía, y sabía que se le podría olvidar pagarlas a tiempo con todo el trabajo que tendría ese mes. Además pensó que era buena idea, podría pasar por su hija y ver el dojo al que iba.

Es por eso que había ido del trabajo hasta la dirección que le dio Sam, no le había puesto el nombre del dojo, le pareció extraño, pero era probable que se le hubiese olvidado.
Llegó hasta un pequeño centro comercial, estacionó su auto y caminó viendo los diferentes puestos, algunos de los cuales ya estaban cerrados pues eran más de las seis de la tarde.