𝚍𝚞𝚖𝚋 𝚋𝚘𝚢 ©

Diez

No. Jaemin no volvió por ella. Ni el día siguiente, tampoco al otro, ni a la semana.

Se había tomado en serio el olvidemos lo que paso. Y Yena sufría con ello.

No hubo una noche que no lo esperara mientras lloraba. Ella no era suficiente. Nunca lo sería. Ni para Jaemin, ni para nadie.

Intentaba acercarse a él, pero él se alejaba. Le mandaba mensajes, pero Jaemin ni los leía. Lo había arruinado. Su peor pesadilla hecha realidad.

Todo había vuelto a ser cómo antes, solo ella y sus malditos sentimientos.

Al menos tenía a Haechan. El sí se había quedado a su lado, aunque no se veían mucho. Haechan le contaba sobre Jaemin, le contó que nada había cambiado para ellos. El intentaba hablar con Jaemin, pero él se negaba a hablar sobre ese tema.

Las cosas venían de mal en peor otra vez, sus notas no subían, no dormía lo suficiente, ni comía. Yena estaba rota.

Jaemin ni la miraba, ¿por que era así?

Solo quería volver a ser su amiga, nada más.

...

Jaemin la observaba detrás de las gradas, Yena lloraba mientras escuchaba musica en sus audífonos. Moría por ir a abrazarla, por contenerla, por besarla.

¿Por que no podía correr hasta ella y hacerlo? ¿Por que se sentía inseguro e insuficiente cuándo se trataba de ella?

Por mucho tiempo supo que sus sentimientos estaban confundidos, él quería creer que siempre la había visto como una amiga pero no era cierto.

Estuvo celoso cuándo la vio en la sala con Haechan, cuándo ellos se tocaban frente a sus ojos, cuándo Haechan sabía de su comida preferida.

Pero pensaba que eran celos de amigos, esos que sientes cuándo creés que te quitaran lo único que tienes.

Porque Yena era lo único que tenía Jaemin, lo único que le importaba.

No eran sentimientos de amistad, eran sentimientos de amor. Y ahora era tarde, la había perdido. Veía a Yena sufrir en los rincones del instituto, ¿por que simplemente no pudo ir a buscarla desde el primer momento? ¿Porque era tan cobarde?

"Yena" la llamó suave, ella se secó las lagrimas rápido y se giró viéndolo.

"Jaemin" susurró mordiendo su labio, nerviosa.

Él llegó a su lado, sentandose junto a ella.

"Lo siento, lo siento tanto" se disculpó tomandola de las manos. "Te amo, Yena"

La chica le regalo una gran sonrisa. "Yo tambien, Nana"

No, Yena, no me sonrias asi luego de todo lo que te hice. No me lo merezco.

"No, Yena. Te amo, yo te amo realmente"

Antes de seguir, la abrazó. La sostuvo en sus brazos, apretándola en su calor, resguardandola en su pecho. Acariciando su cabello suavemente escuchándola sollozar.

Jaemin había confundido sus sentimientos todo este tiempo, pero ahora estaba seguro. Él amaba a Yena, no cómo su amiga, sino de la misma forma que Yena lo amaba a él.

Sus corazones y almas habían estado unidos desde el principio, ahora ambos sabían que nada ni nadie iba a poder separarlos.

Poco a poco se ganaria su amor, estaba dispuesto a hacerlo luego de haberla hecho sufrir. Ahora se daba cuenta, ahora veia todo con claridad.

Siempre había sido ella.

Su mejor amiga, su alma gemela, su otra mitad. Había sido un tonto durante tanto tiempo, pero ahora iba a compensar todo lo que había perdido con la chica.

Comenten que les pareció <3

Y tambien quien sigue para el proximo libro ;)

¡Muchas gracias!