Smitten

Enamorado parte 2

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Llegaron a la aldea muy tarde en la noche, apareciendo en la entrada de la aldea como dos figuras una blanca y negra, ambas con sombreros de bambú con velos, ambas con espadas colgadas en sus cinturones. La aldea estaba muy tranquila cuando pusieron sus pies en ella. La luna era un suave resplandor perlado en el cielo, la luz de la luna brillaba con una luminosidad impactante, como si mirara por encima de la aldea hasta el amanecer.

Observaron durante un rato y estaban entrando cuando oyeron un crujido, seguido de pasos apresurados. Un anciano salió del arbusto más cercano junto con un grupo de cinco o más jóvenes. Debían de estar escondidos entre los arbustos, esperando la llegada de los dos recién llegados.

El anciano ahuecó las manos. "Es un honor para nosotros tener a Wei-gongzi y Hanguang-Jun aquí en nuestra aldea".

El hombre de negro se quitó primero el sombrero de bambú, revelando un rostro extremadamente encantador con una sonrisa deliciosa. El ambiente que desprendía era amistoso y agradable.

"Lamentamos haber llegado a esta hora. Me encontré con algo en nuestro camino hacia aquí" dijo amablemente Wei Wuxian.

"¡Está bien, está bien!", dijo el anciano. "Soy el maestro de la aldea. Gongzi, Hanguang-Jun, no duden en avisarnos si necesitan algo".

Wei Wuxian miró entonces a Lan Wangji, que asintió con la cabeza, todavía con el sombrero de bambú, con el rostro oculto bajo el velo blanco transparente.

"Nos han avisado de que el yao se presentaría hoy", dijo entonces Wei Wuxian al maestro de la aldea.

"¡¿Hoy?!", exclamó el maestro de la aldea. Los jóvenes que le rodeaban también parecían agitados. "¡Pero el yao suele dejar un mensaje antes de venir, siempre es una caja de oro frente a la casa de la próxima mujer que planea llevarse! P-Pero no hemos visto ninguna..."

Wei Wuxian se rio y agitó la mano. "Esa es la razón por la que también llegamos tarde".

"¿Ah?", se confundió el anciano.

Wei Wuxian sonrió. "Pero confía en nosotros, llegará esta noche. Puedes preparar un lugar para quedarnosーah, no tienes que esforzarte demasiado en prepararlo, sólo nos quedaremos una noche".

"Claro, claro, gongzi, cualquier cosa que necesiten de nosotros, haremos todo lo posible por tenerlo listo para ustedes", dijo el maestro de la aldea.

Wei Wuxian le sonrió. "No te pongas demasiado nervioso conmigo, chun-zhang. No te preocupes, nos encargaremos de las cosas por ti. Ninguna mujer será sacrificada nunca más".

Lan Wangji asintió a su lado. El maestro de la aldea también asintió. "Por favor, gongzi, Hanguang-Jun".

Wei Wuxian también sonrió al resto de los hombres. "Además, otra cosa".

El maestro de la aldea preguntó rápidamente: "Sí, ¿qué puede ser, Wei-gongzi?".

"Necesitaría una caja de flores shicheju preparada frente al lugar donde nos alojaremos. No tienes que ir a buscarlas, las tengo listas aquí".

Estiró una mano hacia un lado, cogiendo una bolsa de Qiankun de Lan Wangji. Le pasó la bolsa al maestro de la aldea.

"Aquí están. Creo que... eso es todo por ahora. Muchas gracias por su consideración".

"Ni lo menciones, Wei-gongzi. De hecho, hemos preparado un lugar para ti. A-Qiang te llevará allí", señaló con la cabeza a uno de los jóvenes a su lado. "Mientras tanto, prepararé la caja para ti".