Naofumi se encontraba en dirección a los baños para tomar una ducha al igual que sus compañeras, pero claro que él lo tomaría solo, ya que el de los hombres era compartido, menos mal que no había nadie en las aguas termales, termino de desvestirse cuando escucho entrar a alguien cuando se volteó sintió como su pulso aumentaba considerablemente, ¿En serio su suerte era así de horrible?.
Ren se le quedó mirando de arriba abajo mientras se volteaba a la salida, era tan humillante, nunca se imagino que terminaría en una situación así. Termino de bañarse con mucha vergüenza, ni siquiera se había podido relajar un momento.
Salió con sumo cuidado del baño hasta el lugar donde sus compañeras estaban hablando, ellas lo saludaron, mientras le platicaban como se divirtieron jugando en las aguas, por lo menos ella habían disfrutado.
Por otro lado el héroe de la espada entro de nuevo a los baños, se quedó pensando en Naofumi, el de verdad parecía desconcertado por haberlo visto.
Termino de asearse, se vistió lo más rápido que pudo y se paró cerca de la puerta de Naofumi que estaba llegando solo, sin sus compañeras... Eso era ¡perfecto!
Naofumi se le quedó mirando mientas se le acercaba furioso.
-¿Acaso me estás siguiendo?- pregunto enojado y con cierta frustración.
-Quiero hablar contigo, solo eso, pero sin tu guardiana- Lo último lo dijo casi inaudible.
-No quiero hablar contigo solo para que me inventes cosas falsas.
-Ese no es mi propósito, pero está bien si lo quieres por las malas- dijo el azabache jalando a Naofumi a su habitación.
-¿Que mier- no pudo terminar ya que el contrario lo empezó a besar, el torpemente correspondió; se dió cuenta de su error y lo empujó.
-¿Que crees que haces? Solo que me vea inofensivo, no quiere decir que lo sea.
-Tu me gustas demasiado, no sé cómo decirte que me encantas de todas las maneras posibles- Dijo el vestido de azul mientras lo agarraba de las manos.
- Deja de jugar conmigo, yo sé que me odias- bajo la mirada con tristeza.
-Claro que no, siempre me gustaste y me gustaras, jamás volveré a ocultar lo que siento por ti, así que dame una oportunidad.
El del escudo se quedó pensativo hasta que tímidamente beso su mejilla.
- Te daré una oportunidad, pero si me decepcionas te juro que terminaré matandote.
-Es algo justo- lo beso apasionadamente hasta que sus compañeras llegaron y tuvieron que parar.
Empezaron a salir juntos a escondidas, hacían sus misiones y se reunían, siempre terminaban besandose aunque no llegaban más lejos.
Sus compañeras empezaban a sospechar de el héroe, Filo se quejaba de que su amo no le tomara tanta atención como antes. Rapthalia se estaba impacientando por saber que pasaba.
Al final las dos se lo tomaron muy bien, o bueno tal vez hubo un pequeño enojo de la mayor por no decirle de su relación.
-Esta vez iré con Ren a un lugar cerca, ¿Se pueden quedar solas?- vaya que el del escudo estaba un poco preocupado por dejarlas toda la noche solas pero ellas querían que su amo se pudiera divertir por una noche así que hicieron lo posible para convencerlo de que iban a estar bien.
-Claro que estaremos bien amo, tiene que ir con su pareja- hablaba Filo muy contenta.
-Es más si nos metemos en problemas no comeremos manzanas por un mes- dijo la de cabello anaranjado.
-Suspiro - Muchas gracias chicas, de verdad cuidense regresaré por la tarde de mañana- se despidió de ellas y les dejo un poco de dinero por si lo necesitaban.
Se encontraba nervioso ya que en su vida no había tenido muchas citas por no decir ninguna a parte de las de Ren pero está sería diferente, a demás iban a pasar la noche juntos... ¿Le dolería si lo hicieran por primera vez? Es cierto que nunca iban más lejos pero este era el momento perfecto.
Al llegar vio a ren sentado con una fogata junto a un hermoso árbol y muchas cobijas, junto había comida para el almuerzo y la cena.
-Esto es... Demasiado hermoso para mi -decía mientras se acercaba a abrazarlo - el contrario acepto el abrazo - es lo menos que debía hacer por la persona más hermosa que eh visto - Naofumi se sonrojo de sobre manera, mientas que el azabache solo sonría con picardía.
-Te quería enseñar algo- Ren se inco para enseñarle un anillo de oro no tan estorboso- lo pedí pequeño para que no te estorbara en los combates, así que quiero preguntarte algo ¿Quieres pasar el resto de tiempo que nos quede juntos?- soltó lágrimas mientras se abalanzaba hacia su "prometido"- claro que sí. -le coloco el anillo, a la vez el tambien se ponía el suyo.
-Te amo Naofumi Iwatani, lo haré hasta que no me quedé nada más que tú amor.
Se empezaron a besar lentamente con amor pero ese beso empezó a intensificarse, pronto empezó una batalla de lenguas que Ren ganaba por mucho.
Empezó a acariciar el cuerpo de Naofumi mientras que lo iba despojando de su ropa, empezo a lamer el pecho del contrario.
Naofumi solo soltaba gemidos placenteros, Ren se empezó a quitar la ropa, mientras que sus grandes manos paseaban por el torso hasta el muslo de su prometido. Empezó a tocar el miembro del pelinegro de manera lenta para que esté disfrutará el tacto, Naofumi se encontraba gimiendo de placer hasta correrse.
-Vaya parece que el gran héroe del escudo no tiene tanta resistencia ¿No es así? -hablo el ojiazul con desdén hacia su pareja.
-Tienes razón, ahora por darme este gran placer creo que es mi turno - dijo mientras tomaba el erecto miembro de Ren y lo masajeaba de manera continúa, dejo de hacerlo con sus manos e introdujo el miembro en su boca mientras lamía lentamente. Ren sostuvo su cabeza para que llegara más profundo hasta la garganta de Naofumi, el más alto soltaba suspiros de placer, Naofumi solo estaba feliz de que Ren se sintiera bien.
Ren se corrió en la boca de Naofumi mientras que este se tragaba su semilla - Creo que es momento de prepararte - hablo el héroe de la espada para empezar a introducir dos dedos en la entrada de Naofumi, lo estimulaba de sobre manera, introdujo un tercer dedo, Naofumi solo tenía pequeños espasmos por el placer que tenía.
-¿Estas listo?, si sientes que te lastimo tienes que decirme - el pelinegro solo asintió. Ren empezó a introducir su miembro, dio estocadas lentas hasta que Naofumi se acostumbro, entonces las estocadas empezaron a ser más fuertes, lo puso en cuatro mientras abofeteaba su gran trasero, sacaba su miembro y lo introducía con fuerza, esto solo hacia que Naofumi suplicara que jodiera su culo más, hasta dejarlo sin caminar lo cual Ren acepto. Las estocadas empezaron a disminuir hasta que se corrieron juntos, Ren dentro de su prometido claro.
Se quedaron dormidos hasta en la mañana dónde Naofumi ni siquiera podía sentarse sin que le doliera su trasero.
-Para la próxima debemos moderarnos- decía Naofumi sobando su trasero- Eso sí es que nos podemos contener- hablo Ren mientras lo besaba.
Tal vez estar en ese mundo no era tan malo, al fin y al cabo pudo conocer a el amor de su vida.
Bueno de verdad agradezco que terminaran está mini historia, este shipp me gusta mucho (◕ᴗ◕✿) espero que les haya agradado, díganme lo que piensan y si quieren más historias de esta pareja.
Los quiero mucho pancitos ;)
_Cafesito-Con-Leche_
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𝘍𝘦𝘭𝘪𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘚𝘵𝘳𝘢𝘯𝘨𝘦𝘳𝘴 [RenFumi]
FanfictionEl héroe del escudo podía ser cerrado con la gente, por no decir con casi todos a excepción de sus compañeras y el tarado de la espada, ese maldito que siempre se metía en sus pensamientos, podía disimular sus sentimientos cerca de el, hasta fingir...