La respuesta a nuestras preguntas

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Al tiempo hubo una competición en la que vamos muchos compañeros del club.
Sara estaba resfriada y no puedo nadar pero vino a vernos. Había muchos compañeros del club, entre ellos estaba Elena. Ella estaba rodeada chicas con ganas de saber, ¿él qué? Todavía no lo sabiamos, por lo que me acerque. Allí pude escuchar a una de ellas diciendo:
- Qué fuerte lo vuestro, si hasta te invita a la piscina. Samu es un caballero.

Elena se sonrojo y sonrió. En ese momento entre en la conversación. Todas atónitas al saber que yo bajaba a esa piscina, me pidieron que las invitara. Yo les dije que solo tenia un pase pero ellas insistieron. Al final asentí, sabia que no iba a acabar llendo a la piscina con ninguna de ellas.

En ese momento llegó Sara.

Estaba un poco nerviosa pues le quería contar todo lo que había ocurrido en su ausencia. Ella venía tranquila y me lancé y le dí un abrazo. Le dije que nos apartasemos un momento del grupo para poder contarle lo sucedido.
Ella alucinó con la historia.

Competi, Sara no pudo debido a que estaba constipada.

Cuando terminó la competición. Estuvimos hablando todos juntos antes de despedirnos y en ese momento Paloma insistió en que quería venir a casa de mi abuela para ver a su querido Sergio. Aunque las otras la decian: "disimula un poco Paloma", ella insistía en que no le gustaba.

Nos despedimos de todas.
Sara, Elena y yo habíamos quedado a cenar, porque nuestros padres eran muy amigos. En esa cena podríamos hallar muchas respuestas.

Nos subimos al coche y fuimos a un bar famoso de la zona. Pudimos ver que Elena no soltaba el móvil y por curiosidad me incliné para ver con quién hablaba tan intrigada. Era Samuel. Por desgracia me vio como miraba la pantalla de su móvil y muy cortada lo bloqueó y se puso a hablar con nosotras inesperadamente.

Como teníamos confianza con ella le pregunté:
- Elena, ¿qué hacías el otro día en la piscina con todos esos chicos?
Ella suspiró y tardó en responder:
-Me invitaron. Y para no hacer el feo pues fui.
Mire a Sara. Y con la mirada que le dedique, las dos comprendimos muy bien algo, nos estaba mintiendo.

-Todas la chicas desean ir a esa piscina, ¿por qué te invitaron a ti?- Insistí.
- No se, les caeré bien.
Sin darse cuenta a Sara se le escapo un bufido.
- Si, claro.
Cayó en la cuenta de que sospechabamos.
- Bueno, Samuel y yo somos mejores amigos.
- Aaa vale, eso tiene más sentido.

No quisimos insistir más.
Cenamos tranquilamente hablando del cualquier chorrada pues con ella no había tema de conversación ya que ella no tenía mucha confianza con nosotras.

Cuando terminamos de cenar los padres decidieron que fuéramos a otro sitio para que ellos se tomaran unas copas. Miré a Sara y ella me entendió muy bien: no nos apetecía nada tener que pasar más tiempo con Elena.

Ya que el capítulo anterior era muy corto,hemos decidido publicar antes el segundo. Aún así el viernes nos leemos el tercero.

Os quiere.

Silria♡

El amor de mi amiga es muy extrañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora