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Volvimos a casa antes de que se dieran cuenta que habíamos salido y cada una se dirigió a su habitación sin nada más que desear las buenas noches.

Cuando llegaron juntas a la escuela, Devi le presentó a sus amigas.. Fabiola era de descendencia latina y eso las hizo congeniar bien, Eleanor era una chica de descendencia asiática, ella ama las artes escénica y es muy dramática para sus cosas, Mía pensó que con esa combinación jamás se deben aburrir.

-Chicas, no me lo  van a creer, voy a tener sexo con Paxton- comenzó a contar Devi. Ella sabía que al cosas no eran así pero no quiso interrumpir, estaban recién congeniando y no quería tener problemas con la chica con la que vive bajo el mismo techo. Se disculpó y se alejo en busca de su casillero para dejar su mochila y tomar los cuadernos que le tocaban en la siguiente asignatura. Eso era extraño aún para ella, en su país no solían tener de esas cosas, inclusive, a veces debían pedir sillas en las aulas de al lado.

-Hola- Sacó su cabeza del casillero para darse vuelta y encontrarse a Ben.

-Hey! Te tengo algo- Bajo la mirada extrañada del ojiazul, Mía sacó una gran barra de chocolate con un lindo lazo azul de la mochila que recientemente había guardado- Se que no es la gran cosa, pero quería dártelo en agradecimiento que me hayas ayudado ayer.

Nuevamente Ben sintió su corazón parar y acelerar repentinamente. Intentó no sonrojarse pero fue inevitable. Claro que le habían hecho regalos. Sus padres les daban lo que él pidiera, siempre conseguía lo que deseaba de alguna forma, pero ese acto tan considerado de una chica nueva que lo consideraba su amigo, sin contar que era bella e inteligente... era demasiado para él.

-Oh, wow- Dijo sin saber muy bien como agradecer- No tenías por qué.

-Bah, tonterías, claro que si.-Mía cerró su casillero y lo miró- Tengo Portugués ahora, ¿Y tú?

-Eu também, vamos juntos?- Le respondió con una bella sonrisa. Ella se la devolvió y se aventuraron por los pasillos mientras entablaban una conversación en ese idioma.


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Mía ya se había acostumbrado de no encontrar a Devi a la salida, así que simplemente se iba a casa sin ella. 

La noche anterior habían asistido las chicas y habían tenido una noche de amigas, pero ella no quiso interrumpir con su presencia. Sólo llevaba tres días de escuela y de alguna forma se sentía fuera de lugar, no tenía amigas (Devi no contaba, vivía con ella y tampoco hablaban mucho, tampoco sus amigas, no eran las suyas) y Ben solo lo veía a veces. Y para agregarle drama, los padres de Kamala estaban arreglándole una boda con un ingeniero Indio. Mía no estaba de acuerdo con eso, aunque pueda sonar estúpido, uno debería casarse por amor.

Tranquila pequeña, así es ser la chica nueva, en una escuela nueva, en un país nuevo, creo...

Pero esto cambiaría, estaba decidida, no podía amargarse por eso. Tenía que pasarla bien y lo más importante, destacar en todo lo posible. Después de las clases buscaría algún deporte al cual unirse. 

Estaban en la clase del profesor Shapiro, estaban pasando la segunda guerra mundial, era un tema que le emocionaba porque quería saber cómo se enseñaban estas cosas en otros países. 

Unos asientos a los lados veía a Devi muy distraída, Mía quería crear una amistad verdadera con ella y no solo porque vivan juntas, creía que era una persona muy lista e interesante.

-Devi- Dijo el profesor. Ambas salieron de su pequeña ensoñación y prestaron atención- Te hice una pregunta. Nombra siete grupos que los nazis querían exterminar.

-Oh- Dijo la chica India- judíos, discapacitados, francmasones, disidentes políticos, homosexuales, testigos de jehová y ahm...

-¿Puedo señor Shapiro?- Habló Ben y el mencionado lo dejó- Falta el pueblo romaní.- Miró a Mía y ella le dio una sonrisa, de esas que la hacían brillar.

-Correcto Ben- elogió el profesor.

-Tranquila Devi, se lo difícil que es memorizar siete datos.- Ese comentario hizo que Mía sacara una pequeña risita. Esos dos tenían una rivalidad muy fuerte. Ya había escuchado con anterioridad los comentarios que se daban y realmente, ese fue un comentario suave comparados con otros.

Devi murmuró algo y el señor Shapiro le pidió que lo repitiera. Y ella, sin pensarlo, lo hizo.

-Dije que desearía que los nazis mataran a Ben.- Toda la clase soltó un "oh" y la cara de Ben se deformó.

-Por Jesús, María y José, Devi, ¿Cómo se te ocurre decir eso?- Reclamó Mía en español.

Ambos fueron donde la directora y Mía se quedó ansiosa esperando el timbre para ir a ver esos dos. Cuando se marcó la hora de salida, tomó sus cosas con rapidez y justo los vio a los dos caminando juntos a paso lento. Mientras se acercaba podía escuchar a la muchacha disculparse. Esperó que terminaran su conversación para acercarse al chico.

-Ben ¿Estás bien? Yo me molestaría mucho si me dijeran algo así, nunca lo han hecho, creo que esos comentarios son muy gringos, pero escuché a Devi disculparse, ¿Están bien ahora? ¿La directora no hizo nada?- Mía habló muy rápido que ni con el nivel de Español que poseía Ben podía entenderla. Aún así pudo sentir el tomo preocupado de su voz.

-Mía, no te entendía nada, pero estoy bien, ya arreglamos todo- le dijo tranquilizándola.

-Está bien- comentó- Que linda foto- Apuntó la foto de Ben junto a una chica que tenía pegada en su casillero- ¿Quién es?

Oh- Respondió inexplicablemente nervioso- es mi novia, Shira, somos una pareja perfecta, ¿No lo crees?

-Oh- La sonrisa de Mía se había ido- Claro que si.

Fue lo último que dijo antes de disculparse e irse de ahí.




Yo Nunca...  me he enamorado - Ben GrossDonde viven las historias. Descúbrelo ahora