Mía estaba consternada, no podía ocultarlo. En unos días se había ilusionado tontamente. ¿Qué quería obtener? Ella era la nueva, llevaba muy pocos días allí. Es así como pensó que para ser alguien en esa escuela, debía dejar de tener el apodo de "Chica de intercambio", así que decidió ser la mejor en algo que destacara mucho en la escuela, que generara impacto, ¿Y qué mejor que un deporte?
Claro, no cualquier deporte, el estelar de la escuela. Natación.
Esa misma tarde, después de ir a comprar el traje de baño reglamentario, el gorro y los lentes de baño, se dirigió a la piscina del lugar.
Wow, que primermundista, en mi escuela solo teníamos un patio de cemento y con suerte unos arcos de futbol.
-Disculpe, ¿Usted es el entrenador?- Preguntó al hombre con el silbato y la gorra. Obviamente era él pero debía ser cortés.
-Ese soy yo, ¿Qué deseas?
-Quiero hacer las pruebas para entrar al equipo- El entrenador la observó con la ceja elevada. Era de altura promedio y flacucha, no creía que pudiera ser de buena ayuda, pero, por una corazonada, la dejó hacer las pruebas. Mía feliz se fue a preparar. Se dio cuenta que no habían muchas chicas en las pruebas, con suerte serían unas dos contándola.
Salió un poco cohibida del vestidor al sentir las miradas de los demás chicos que hacían las pruebas y de los integrantes del equipo que estaban sentados en las gradas, listos para comentar las carreras.
-Bien, como este año no se presentó tanto alumno a las pruebas, podremos hacer las clasificatorias en una sola carrera.- El entrenador hizo que se prepararan. Eran solo ocho.
Mía clavó su mirada en el agua. Debía hacer 100 metros estilo libre, o sea, tocar el otro lado de la piscina y volver. Respiró y se preparó. Siempre se sintió en la obligación de que todo lo que hacía, por mínimo que fuera, debía ser perfecto, y esto no sería la excepción. Dio todo de si y funcionó. Claro que funcionó, llegó en primer lugar.
El entrenador la miró sorprendido junto al equipo, había subestimado a la chica. No solo había logrado ser la mejor, si no que casi había superado el mejor tiempo, el cual había hecho Paxton.
-Creo que está demás decir que estás dentro- Le dijo cuando Mía había salido del agua. Ella le sonrió mientras saludaba a sus nuevos compañeros.
-Eso ha sido sorprendente. Soy Paxton.- Se presentó el chico por el cual Devi estaba loca.
-Muchas gracias, soy Mía, creo que compartimos la clase de historia.
Cuando iba saliendo de los vestidores, Paxton le ofreció llevarla a casa porque debía ir a hablar con Devi, la verdad, no quería saber de que se trataba. Pasaron por otras canchas donde el equipo femenino de hockey estaba jugando. Estaba tan concentrada en lo que le contaba Hall-Yoshida que no se percató de la potente mirada que le daban desde las gradas.
Ben se sentía extrañamente mal por comentarle a Mía que tenía novia, pero verla caminar junto al popular de Paxton, mirándolo tan concentrada y riendo como si fuera lo único que le quedaba en la vida, le produjo un hueco en el estómago. ¿Por qué no podía ser él en este momento? Se molestó con sigo mismo por pensar esas cosas, él tenía novia, no podía olvidarlo por cualquier chica. Aunque Mía no era cualquier chica.
El viaje fue muy entretenido, hablaron y se conocieron más. Paxon por primera vez creyó que podía tener una amiga mujer sin que lo consideraran un objeto sexual y eso le gustó mucho. Y Mía también lo miraba así, como un gran amigo.
Se bajaron juntos y se despidieron en la puerta mientras el chico esperaba a Devi para poder hablar.
La chica india la miró extraña cuando la vio entrar con Paxton detrás ¿Por qué habían llego juntos? ¡Ellos no podían estar juntos!
Y después de lo que le dijo el atleta, que era mejor dejar todo hasta ahí, pensó que su teoría estaba correcta. Mía estaba saliendo con Paxton. ¿Cómo había sido tan rápida? ¡Ella sabía del trato que tenían y aún así lo había hecho!
Se volvió a sentar en la mesa y miró fijamente y con mucho odio a Mía, sin prestar atención a lo que contaba.
Si tan solo hubiera escuchado, nos ahorraríamos todo el drama, ella solo contaba el cómo quedó en el equipo de natación. Los celos son peligrosos, Devi.
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Yo Nunca... me he enamorado - Ben Gross
FanfictionMía Rodríguez es la mejor estudiante de su zona y por eso le otorgan una beca de intercambio a California, EEUU. Grandes giros y nuevas oportunidades se abren al llegar a su nueva escuela y conocer su familia de acogida, los Vishwakumar.