Hanahaki Disease; Porque mi amor sabe a flores.

"Capítulo 6: Ayuda"

"Es sobre Midoriya"

Aquel simple par de palabras, había logrado captar la atención del rubio. Por más que el quisiera engañar a otros y a sí mismo, muy en el fondo quería al pecoso y se preocupaba por él.

- ¿Qué quieres?

- Bueno... Es algo privado, ¿Kirishima? - Momo dirigió su mirada hacia el pelirrojo, quién reaccionó al instante.

- Oh, ¡Si! - Se despidió con la mano y se dio la media vuelta - Nos vemos luego.

Momo y Bakugou quedaron a solas. De alguna manera, Momo presentía que Bakugou la ayudaría.

- Habla ya.

- Bueno, he notado que Midoriya-San se ha comportado de una manera extraña últimamente. ¿No sabrás de casualidad porqué? ¿O quizás estás involucrado en esto?

- ¿Eh? - El rubio la miró sorprendido, ¿Porqué asumía que él tenía que ver en eso? - ¿De qué hablas, loca?

Katsuki suspiró, enfadado.

- No tengo nada que ver con eso, no digas cosas como si supieras.

- Lo lamento, pero creo que tienes que ver en algo.

- No es así.

Momo se rindió, quizás el rubio si decía la verdad.

- Bien, te creeré. Pero aún así, por el bien de Midoriya deberíamos intentar ayudar. Aunque sea de una manera indirecta.

Katsuki se estaba comenzando a desesperar, ¿Porqué no simplemente iba al grano?

- Habla rápido.

Momo se cruzó de brazos, y con molestia continuó hablando.

- Deja de ser tan tosco con Midoriya, trátalo un poco mejor. Solo eso te pido a ti. - Bakugou iba a replicar, pero la pelinegra le interrumpió. - Yo me encargaré de todo, tu solo no vayas a darle más peso para cargar sobre él.

Bakugou bufó.

- Como quieras.

El rubio se giró, y se fue. No se molestó en despedirse, solo quería largarse de ahí.

Momo sacó su teléfono, ella sabía que sin la ayuda de Todoroki ni la de Katsuki, solo le quedaba una persona, marcó el número y llamó.

Una voz dulce respondió al otro lado del teléfono.

"Hola Momo."

- Uraraka, hablé con Bakugou y con Todoroki acerca de Izuku.

"¿Y qué te dijeron?"

- No van a ayudar... ¡Es decir! Todoroki se negó a comprender la situación, Bakugou simplemente se va a mantener al margen.

"Oh, ya veo..."

Momo sonrió un poco. Y habló demostrando alegría en su voz.

- Gracias por haber confiado en mí, Uraraka. Midoriya es tu amigo, sin embargo acudiste a mí para que ambas podamos ayudarlo, gracias por confiar.

Escuchó una pequeña risa al otro lado.

"Sabía que podía confiar en ti. No te preocupes."

- Bueno, creo que debo irme. Adiós.

"Nos vemos"

Cortó la llamada, y guardó su teléfono. Había sido un día largo, sin embargo, aún no acababa.

Uraraka había confiado en ella el poder ayudar al peliverde, y ella se esforzaría por hacerlo.

"Sé que puedo confiar en ti, me temo que yo no puedo ayudarle mucho. Somos amigos, pero se esmera demasiado en ocultármelo. Y temo agobiarlo demasiado."

"Solo podemos ayudarle demostrándole que él es importante, y que puede confiar en nosotras."