Parte ocho.

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Al siguiente mes, compartieron un recital de la banda que tiempo atrás, los había vuelto a unir. Pasaron esa velada abrazados, cantando y riéndose sin parar. Volvieron totalmente cansados, había valido la pena. Pero como todo no es color de rosas, al poco tiempo, la vida decide volver a separarlos, quizás por poco tiempo, o quizás por un tiempo indeterminado. 

Ya la confianza no era la misma. Ya sus días juntos se tornaban un poco densos, tal vez. Pero lo más triste, es que no fue por parte de los dos. Él siempre estuvo cerrado a crear una relación y como a ella, un título no le importaba, siguieron como si nada. Siempre fue inseguro y anteriormente había sufrido. Pocos logran recuperarse, después de la primer herida amorosa, ella, por ejemplo, se entregó totalmente sin importarle saber que en algún momento, iba a volver a sufrir. Y él no. Él no quería volver a pasar por aquello que alguna vez, lo lastimó tanto. Y por más lamentable que sea, jamás logró quererla de la misma forma que ella, ya que no estaba acostumbrado a que lo quisieran de semejante manera. 

AMOR CONDICIONALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora