Marionetas y Piratas: Amor por la Libertad (Secuela)

Capítulo 3: El Viaje (Primera Parte)

(Holaa. Lamento tener que dividir el capítulo, estoy teniendo algunos problemas con Wattpad y tengo miedo de que si sigo haciéndolo más largo no podré publicarlo después ;_;. De todas formas, ya me pasé de las 2000 palabras aquí :"v. En fin, espero que lo disfruten y de nuevo, mil disculpas 💔. Intentaré traerles la siguiente parte esta semana)

...

Los rayos del sol y el bello canto de las aves traspasaban las ventanas de la casa, el viento soplaba con suavidad las cortinas dando al lugar un aire de tranquilidad-

–¡SIIIIIII VOY A SUBIRME A UN BARCO DE VERDAD!

Un aire de tranquilidad que habría durado más si la menor de los Fox no fuera tan ruidosa.

Ese día y durante el desayuno, sus padres le habían anunciado a ella y sus hermanos que dentro de una semana harían un viaje en familia a La Isla de las Marionetas. Aquel sería no solo el primer viaje de la pelirroja sino también la primera vez que subiría al barco de sus padres, algo que deseaba hacer desde hacia mucho tiempo.

La noticia también sorprendió a los gemelos, aunque se habían acostumbrado a la vida en tierra realmente extrañaban el mar y la sensación que les provocaba el estar allí. Además, tanto ellos como sus padres tenían ganas de ver a Puppet y su familia. Si bien su hermana menor no recordaba mucho a la marioneta, a ella le generaba curiosidad la idea de conocerlo mejor cuando llegaran a la isla.

Al conocerlo prácticamente desde que era una bebé, Mangle fue quien más le había hablado sobre él. Gracias a ella, sabía que era un ser mágico y un amigo de la familia.

La capitana también le contó una vez sobre su hijo, Orión, y que un día, cuando viajaran de nuevo a la isla, ambos podrían conocerse. A Jade no le emocionaba tanto la idea. Pero, muy en el fondo, la menor deseaba tener un amigo, alguien con quien jugar y divertirse pues sus hermanos ya eran mayores y casi ni le prestaban atención.

Desde que supo la noticia del viaje, había empezado a buscar todo lo necesario para divertirse y protegerse durante el mismo, no quería olvidarse de absolutamente nada. El menor de los gemelos estaba llevando entre sus manos algunos elementos de pintura para guardarlos en su maleta cuando pasó justo por la habitación de la pelirroja. La puerta de la misma estaba abierta por lo que pudo ver perfectamente como la zorrita iba de un lado a otro recolectando objetos de su habitación para añadirlos a la gran pila de peluches, ropa, libros y juguetes de madera que había armado sobre su cama.
Al lado de esa montaña de objetos estaba la maleta pequeña que Jade pensaba usar para el viaje, la misma estaba abierta de par en par y por el momento, vacía.

–¿Jade?—la llamó su hermano mayor desde el umbral de la puerta. Jade sacudió su cola cuando lo vio allí—

–¡Hola Ben! ¿Me ayudarías a empacar hermanito?

El gemelo de ojos azules miró de reojo la maleta y la montaña de pertenencias de su hermanita sobre la cama.

–Emm seguro, pero...¿No crees que eso son muchas cosas?

Jade dejó
–¡Papá y mamá dijeron que nos quedaríamos todo el verano en la isla!—decía la pelirroja mientras seguía con su tarea de llenar la pila de objetos sobre su cama—

–Lo sé...—respondió su hermano mientras la seguía con la mirada—pero-

–¡Y ellos siempre dicen que hay que estar preparados para todo en un viaje, así que quiero estar lista!

Luego de aquellas palabras Jade dejó el último peluche sobre la pila y se volteó hacia él sonriendo orgullosa. Ben entró a la habitación riendo, tomó el último peluche que Jade había colocado en la sima de la montaña y luego de ponerse a su altura le dijo: