Mírame por dentro

Capítulo 1

Suenan las campanas, ella sale corriendo sin más de la iglesia arrastrando su hermoso y largo vestido blanco con destellos dorados, el bello maquillaje que le había llevado horas ahora está totalmente lleno de gotas de llanto, se arranca su velo de novia y mientras llora lo arroja al suelo junto con su boquette...

El día más "hermoso" de su vida se acaba de arruinar por completo.

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Soy una tonta, era obvio, era bastante obvio que la única que sentía algo en esta relación era yo, pero, ¿Por qué esperar hasta ahora? ¿Por qué causarme este dolor? ¿Por qué con ella? ¿Tenía que ser exactamente ella?.
Hubiera preferido mil veces que me dijeras la verdad, maldito seas Renn, maldito seas.

Cinco años de relación, cinco, ¿Acaso no significaron nada para ti? ¿Solo fui yo la enamorada? ¿Solo yo quería compartir el resto de mi vida junto a ti? ¿Solo yo? ¿Por qué Renn? ¿Por qué sólo no me dejaste? ¿Por qué seguir continuando con esto si ya no sentías nada por mí? ¿Por qué? Yo siempre te traté bien, siempre di todo mi, di lo mejor por ti y para ti, ¿Qué hice mal? ¿Acaso te fallé? ¿Acaso no fui suficiente? O ¿Simplemente signifiqué nada para ti?

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Feldhi va detrás de su amiga, ella aún no entiende que pasó y no pretende preguntar, su amiga tiene el corazón destrozado y no quiere echarle sal a la herida, solo quiere consolarla. Intenta alcanzarla pero es tarde Sol subió a un taxi y no sabe a dónde se fue.

Una, dos, tres... siete, dieciocho, ya va varias llamadas y ella simplemente no contesta.

Intenta una vez más pero en esta sí tiene suerte:

- Aló, Sol, aló ¿Dime dónde estás? ¿Por favor habla? ¿Estás bien? - dice Feldhi angustiada casi gritando al teléfono - Sol, por el amor de Dios, di algo.

Luego de largo tiempo entre sollozos

-Fel... - dice Sol entre lágrimas - ¿Por qué Fel? ¿Por qué a mí?

- Por favor no hagas nada, quédate tranquila, iré por ti, solo dime ¿Dónde estás?

- Fel... ¿Alguna vez diste todo el alguien y esa persona simplemente te dio... nada?

- ¡Oye! ¡Por dios! No sé lo que esté pasando por tu cabeza en estos momentos, solo no hagas nada y quédate ahí. ¿Dónde estás, Sol? ¿Dónde? ¿En la casa del árbol? ¿En el departamento de tu primo?

- Estoy... Estoy en nuestro lugar secreto. - dice Sol con una voz extrañamente tranquila.

- Iré a por ti, espérame. - dice Feldhi apresurándose - No me cortes ¿Si?

- No iré a ningún lado, no tengo ganas, ni fuerzas es más aún no me quité mi vestido de novia.

- ¿Cómo?... Han pasado tres días sin saber de ti... Sol, eres mi mejor amiga como mi hermana, si tú estás mal yo también. Te llevaré algo de ropa y comida porque de seguro no comiste nada.

- No tengo hambre Fel, no quiero nada.

- ¡No, no, no! Nada de tonterías, vas a comer algo para sobrevivir y por tu bien, escúchame bien, nadie vale tu vida, nadie, nadie más que tú. - dice Feldhi algo furiosa.

- ¿Y qué tal si ya ni siquiera yo quiero mi vida?

- Ya estoy cerca, Sol, no pienses en nada, solo quédate tranquila y sigue al teléfono.

Feldhi va por la carretera manejando apresurada, intentando mantener la calma para no ocasionar un accidente.

El viaje es algo largo está a horas de su casa, así que solo tratará de manejar con paciencia y responsabilidad.