Jimmy And The Green Bandit

Preludio: Jiliam Batson Black

(aviso, esto es solo el contexto de la amistad de los personajes principales. Si os parece mucho, podéis saltároslo, pero es importante si quieres saber de dónde proceden la mayoría de las cosas y/o expresiones de los personajes. Gracias por leer y que disfrutes de mi libro).

Era un chaval de estatura media, no muy fuerte y flacucho. Su piel era de color carne y un poco pálida. Tenia el pelo castaño y sus ojos eran color marrón claro. Jimmy era tímido, callado, casi no hablaba, excepto para responder a alguna que otra pregunta en clase.

No le gustaba socializar y aveces cuando lo hacia, la gente lo ignoraba porque tenían otras cosas que hacer o simplemente porque no querían hablar con el, y eso le quitaban las ganas de intentarlo.

Jimmy vive en Las Palmas de Gran Canaria, le encanta su isla. Vive en un barrio llamado Schamann desde que tenia 6 años y se lo conocía como la palma de su mano como suelen decir, pues eso, que se conocía el barrio casi entero menos ciertos sitios por los q nunca había pasado ya que sus padres no le dejaban.

A Jimmy le gusta muchisimo los videojuegos, es un gran gamer, y algún día quiere convertirse en el numero 1 jugando al Minecraft. Y a sus padres les parecen bien, siempre y cuando estudie y tenga tiempo para el colegio, cosa que a él le parece bien.

A Jimmy le gusta la mayoría de juegos en general pero a los que más le gustan son el Minecraft, el Rocket League y el Brawl Stars, pero siempre pone un limite cuando va a jugarlos, para no pasarse de tiempo, y a sus padres les gusta mucho que haga eso y por eso siempre lo dejan jugar cada vez que termina los deberes.

Jimmy estudia en el CEIP Castillo, un colegio público en Las Palmas no muy conocido, pero que esta bien.

Jimmy vivía en Moya, pero por cuestiones de trabajo de sus padres, ellos y el se tuvieron que mudar a Las Palmas.

Jimmy tenía un mejor amigo llamado Daigo Sánchez, lo cual es raro teniendo en cuenta que casi no hablaba con nadie. Jimmy lo conoció en 4° de primaria, en el segundo trimestre, y ellos dos se hicieron mejores amigos, casi inseparables.

Daigo era nuevo en el colegio. Daigo se veía muy alegre de estar ahí, por alguna razón. Daigo era muy alegre y activo, dispuesto a todo, valiente e intrépido, sediento de aventura. El era amable con todos y era bastante popular, esté donde esté, no sabía ni como. Para él, el cambio de colegio no le resulto una pena, sino una nueva experiencia, una aventura más para su historial, una aventura la cual aprovecharía a tope.

Después de introducirse a la clase, Daigo se sentó junto a Jimmy. Este estaba nervioso y un poco preocupado de que Daigo se convirtiese en otra persona más que lo marginaría en el cole, pero Daigo no era así. Él era de ese tipo de personas que siempre quiere ser amigo de todos y que casi siempre lo consigue.

Después de que la clase terminase, Daigo se vio rodeado de todos sus nuevos compañeros de su nueva clase, menos de Jimmy, que lo estaba mirando de reojo mientras se apoyaba a la pared pegada a su mesa. Y después de que Daigo pudiese deshacerse de todos sus nuevos compañeros y de responder a todas sus preguntas durante los descansos de las tres primeras horas, se acerco a Jimmy en el recreo y quiso hablar con el.

-Hey colega, que tal estas? No hablas mucho al parecer. Como te llamas?- Dijo

-Porque querrá hablar conmigo? Querrá saber mi nombre para poder insultarme con propiedad? Es q no hay mas personas con las que hablar?-. Pensaba Jimmy al ver que Daigo sentándose junto a el en la grada.

-Oye colega, estas ahí?- Dijo Daigo

-Sisi estoy aquí-

-Y entonces? Me dices tu nombre?-