Capítulo 2: El Maletín Fantasma

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-ARMAS!?!?- Grito Jimmy al abrir el maletín desesperado.

Aver aver aver, retrocedamos unos días antes, que sino no os enteráis.

De primeras quiero decir q soy Jimmy, para que no os extrañéis si hablo en primera persona.
Os cuento:
Cuando llegamos a clase, los profesores solo se presentaban y se hacían los buenos con nosotros, ya que era el primer día y siempre querían parecer buenos para dar una primera buena impresión, la cual al final acaba siendo lo contrario a lo que son, pero en fin.
Y ya había llegado la hora del descanso en el patio, y al salir me apoyé en la pared junto a una maceta que había en una esquina y ahí le quede los primeros 10 minutos pensando en mis cosas como nuevas formas de ganar juegos o estrategias para el ajedrez. Básicamente estaba en mi mundo, hasta que vi a Daigo en su patio rodeado de mucha gente, lo que era normal, cuando no estaba yo cerca de él.
(Hagamos una pausa... Solo quiero aclarar que Daigo es como un imán para la gente y yo una especie de repelente que los aleja. Entonces cuando estoy cerca de Daigo, la gente se aparta, aunque nose que tengo de malo, pero la gente siempre me ha visto así, nunca lo he entendido, en fin, a la historia)

Cómo iba diciendo, Daigo estaba rodeado de chicos y chicas, interesados por sus historias, hazañas y cosas intrépidas que ha hecho en su vida. Y como me aburría un poco, decidí ir a saludarle a él y a sus nuevos compañeros, pero como este año las normas son más estrictas, no podíamos cambiar de patios así como así.
Entonces, Daigo se dió cuenta de que intentaba ir a su patio pero no me dejaban así que nos hisimos señas para encontrarnos en el baño, así que fui yo primero para que no sospechasen y luego iría el y nos veríamos allí. Y ya de paso fui a hacer pis.
Y atentos porque aquí es donde se viene lo extraño.

Había un maletín, al lado del váter. Era como si me estuviese esperando allí o algo, y por miedo, claramente no lo toqué, hise pis y salí de allí con escalofríos. No me quise preguntar cómo había llegado, pero, me era familiar, se parecía al que me había encontré en el bazar está mañana, pero tenía algo diferente...
Al salir, vi llegar a Daigo:
-Hey, q tal don popular? Jajajajaja- Lo saludé

-Anda, no es para tanto, que tienes? Envidia de mí por ser tan popular?- Me respondió el entorno burló.

-Ya sabes porque no me gusta hablar con la gentee, sabes que me cuesta-

-Pues eso va a cambiar ahora- Dijo Daigo llevándome de nuevo a mi patio.
-Puede que estiviese rodeado de mis compañeros, pero eso no significa que esté ciego, y desde mi patio vi como mirabas a tu compañera, que según uno de mis compañeros, se llama Sofía. Ves lo que se consigue uno al tener influencia? Consigues lo que quieres y tienes ojos por todas partes-

-Aver, Daigo,
1.Es solo una compañera, y su nombre y su voz me sonaban mucho, nada más
Y 2. Porque me llevas a mi patio??-

-Sencillo, voy a hacer que hables con alguien de tu clase AHORA MISMO-

-QUE!?!? NANANA, ¡NI LOCO! Mira, si no lo haces, te compraré un paquete de papas, aquí en la cafetería, pero me acabo de acordar de que está mañana prometiste darme uno, así que estaremos en paz, no creas que se me había olvidado, jajajajajaja-

-Esta bien, pero tarde o temprano lo tendrás que hacer, y por cierto, vigila al abusón, que me han dicho que está en tu clase, es así?-

-Sisi, es así, y creo q este año ya venido a por más, pero no pasa nada, me las apañare-

-Seguro? Cualquier cosa, estoy aquí-

-Si tranqui-
En el fondo sabía que tendría problemas, pero no le iba a pedir ayuda, porque no podía estar toda mi vida recurriendo a él en mis problemas, debía aprender a manejar mis propios asuntos, además, seguro que iba a estar ocupado con sus nuevos amigos.

Entonces Daigo volvió a su patio discretamente.
-Noooooo- Se me había olvidado decirle sobre el maletín que había en el baño. Entonces decidí ir a ver si estaba otra vez allí, pero no... Y pensé que el dueño habría vuelto a por él, así que no le di más importancia.

Ya se había acabado el patio y volvimos todos a clase, yo iba último en la fila y al subir las escaleras vi por en medio de la barandilla, el mismo maletín de antes, abajo, apoyada a la pared, pero un par de personas pasaron y derrepente desapareció, ASÍ!! SIN MÁS!!
Entonces me empecé a asustar un poco porque esto ya no era normal, pero intenté tranquilizarme y seguí subiendo las escaleras.

Había pasado la 4° hora, y según el horario que nos dió muestra tutora, a 5° nos tocaría Historia y se suponía que nos tocaría con un profesor que conocíamos del año pasado, pero en vez de el, apareció un hombre muy diferente a él. Dijo que se llamaba Martín. Era alto y robusto, pero iba con corbata, gafas y pantalón de traje. El hombre me resultaba familiar, muy familiar, lo quise relacionar con el hombre del bazar, el jefe de la banda, pero no podía asegurarlo del todo.

-Hola alumnos, soy Martín Pómez- Su voz era imponente, pero quería parecer amable. -El sustituto de vuestro profesor de Historia-

Se notaba que era astuto por como hablaba, imponía respeto.

-Bien chicos, empezaremos diciendo nuestros nombres completos para que pueda saber cómo dirigirme a vosotros-
Y todos iban diciendo sus nombres, y cuando dije el mío, el profesor me hecho una mirada maliciosa pero de lo más discreta.

-Muy bien chicos. Ahora voy a ver qué sabéis sobre el descubrimiento de Canarias, porque me dijeron que eso lo habéis dado el año pasado, no? Pues esta es la dinámica, saldréis de uno en uno, y dibujareis la respuesta a la pregunta en la pizarra, está claro?-

-Sii- Dijimos todos al unísono.

Y las preguntas que el profe le hacía a mis compañeros eran fáciles, pero cuando fue mi turno, sonrió maliciosamente. Se veía que tenía algo "especial" preparado para mí, y yo al percatarme de esto, me preparé.

-Muy bien... Jimmy, no? Esta es tu primera pregunta: Donde de sitúa la ciudad Ertangia?-

-No lo sé profesor, eso no lo hemos dado- Dije yo controlando mis nervios.

-Nunca has dado geografía?- Me preguntó el. -Pues deberías saber eso! Me da que alguien estaba en las nubes mientras explicaban-

Y toda la clase se rió de lo que dijo, poniéndome en vergüenza.

-Pues dime, cuantos años tenía la mascota del faraón Manhopet II? Y cuando lo amaestro?-

-Tampoco hemos dado eso profe- Me justifiqué yo

-Mi madre! Me da que tendré que ponerte preguntas de: En que planeta vivimos, o cuántos hay, ahh no, eso seguro te resulta difícil también, yyy tranquilo, para la próxima clase te traeré el chupete y el biberón, que veo que te los has olvidado en casa-

Y todos volvieron a reírse y empezaron a hacerme burlas y yo empezé a poneme furioso. Me estaba conteniendo y menos mal que me volví a mi sitio, porque sino habría explotado ahí mismo, delante de toda la clase.

El profesor lo había hecho a posta... Sabía que me enfadaría y lo consiguió.
Y otra vez no me di cuenta de que cuando me empezé a enfadar, mis ojos empezaron a brillar y a desprender un tono verde, pero solo el profesor se dió cuenta de ello y al hacerlo, sonrió y se sentó en su silla.

Y unos minutos después de ese suceso acabo la clase.

• HOLAAA, que tal?✨

• En este capítulo, hemos visto como están nuestros personajes en sus nuevos entornos. Como el profesor Martín trama algo yy esa maleta misteriosa que no para de aparecer y desaparecer.😱

• Espero que te esté gustando, cualquier fallo que veas coméntamelo, y si tienes alguna sugerencia para el libro, o algo que quieres que incluya o que ocurra, me lo podéis decir en los comentarios 😋

• Votad comentad y sobre todo disfrutad✨ Nos vemos en el siguiente capítulooo

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