Kermes.

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Eri-chan finalmente entiende lo que es llorar de felicidad.

Observar a su más grande héroe casarse con el mejor héroe que él tanto ha admirado (amado) por tanto tiempo, es una increíble emoción.

Lo sabe, lo entiende y lo percibe porque esos ojos esmeralda que tanto le gustan se notan tan brillantes, tan contentos, tan ilusionados y llenos de vida como los suyos durante el festival escolar de la UA. Jamás imagino que un día podría apreciar desde otro enfoque el aspecto radiante de una persona. Ahora comprende el porqué de las lágrimas de Izuku tras contarle su experiencia.

Ella lo hace. Sus lágrimas se acumulan y caen con gracia por sus mejillas mientras el joven Izuku está firmando, a mano nerviosa, los papeles del enlace. Apretando los labios con el vago intento de ocultar su sonrisa, a pesar de la penosa situación que se ve envuelto entre tantos niños, maestros, padres de familia y el alboroto escandalizado en "contradicción" por parte de Kaachan, quien termina cediendo con una mueca –Eri aún no puede determinar si es socarrona o satisfecha-, cuando observa a Deku, muy sonrojado, pasándole el bolígrafo.

- Es sólo un juego de niños, Kaachan.

- Juego de niños que te está gustando mucho, ¿verdad, Deku de mierda?

- ¡Kaachan!

Se escandaliza su héroe favorito, reprimiéndolo y pidiendo, con un dedo sobre sus labios, que modere su lenguaje enfrente de tanto público menor y mayor que merece respeto los cuales ríen entretenidos por la escena típica de los jóvenes pro héroes.

"Ellos ya parecen casados"

"Sí, sólo les hacía falta formalizarlo."

"Se ven tan bien."

"Eri, tienes mucha suerte. Tienes a los mejores padres del mundo."

La pequeña sólo puede ensanchar su sonrisa ante la verdad. Si sufrió en un pasado, ahora la vida le está otorgando felicidad, fortuna, bendición y el mejor de los presentes. Y, gustaba de compartirlo. Por eso, se dedicó a buscar eso mismo tanto para Mirio como para Izuku; sus padres. El primero lo logró en la celebración de conmemoración a los héroes del año. Pudo formalizar la relación entre el rubio y el azabache. Ahora seguía su segundo padre, quien lo invito a la kermés de su primaria, insistiendo que cumpliera con su promesa de asistir, enfatizando que invitara a su persona favorita.

Sabía de quien se trataba, así que pidió ayuda a sus amigos y amigas del salón incluso a la maestra para ser los encargados de llevar acabo el stan de las bodas, con el fin de lograr su cometido. El capricho inocente de una pequeña niña tan adorable, como ella, no se le podía negar. Ni siquiera el Great Explosion Murder God Dynamite además conocía su debilidad ante su oposición y pensaba usarla. Y esa era su padre; la de su padre era ella, así que, todo término en un éxito rotundo.

Ahora, será conocida oficialmente como la hija de las parejas más famosas y poderosas de súper héroes de todo el mundo.

Por eso, Eri llora de la felicidad sobre todo cuando es el propio Bakugou, quien agradece su plan, meciendo sus cabellos con un afecto que desconocía para luego tomar su mano, con la suya - donde porta la argolla de matrimonio-, siendo balanceada por ambos héroes como la típica familia feliz.

Fin.

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