I FEEL YOU / Pierre Gasly

22.

Esperaba que Susie no siguiera insistiendo con esta tontería de hacer algo especial para lograr pasar algo de tiempo en familia o algo así, pero mis suplicas no habían sido escuchadas, de hecho habían sido totalmente ignoradas. ¿Por qué me hacen esto? No tengo las agallas suficientes para escucharla dirigirse a mi de forma dulce y amable cuando la mayoría de las veces yo he sido una persona horrible con ella. No es como que debería importarme pero hasta que a Toto no se le antojara devolverme mi departamento por huir de el cinco meses tendría que vivir aquí, con ella. Bajo el mismo techo y no había forma de seguir en esta situación incomoda.

"¿Podemos dejarlo para otro día? Digo si no quieres esta bien, Toto dijo que hace mucho que no lo haces y creo que es raro". Murmuro, me mordí el interior de la mejilla y negué antes de sacar los ingredientes para ponerlos sobre la encimera de la cocina.

A mi padre se le había ocurrido la maravillosa idea de sugerir que horneáramos algo en casa, no tenía ganas de pastelitos o algún postre dulce de las reposterías del exterior. Infle los cachetes y le di una sonrisita.

" No creo que queden tan bien, hice algunos panqueques cuando Daniel y Lando estuvieron aquí pero los brownies no...".

"Oye Hemma, tranquila". Sentí sus manos sobre mis hombros tocándome con timidez. "Esta bien si no quieres no te presionaré".

"Es solo que es extraño ¿sabes? estas recetas eran de mamá y todo lo hacia con ella y siento como..".

"¿Como si estuviera ocupando su lugar?".

"¡No!". Abrí los ojos horrorizada ante su confesión, jamás había sentido que Susie quisiera llenar ese puesto.

"Se que no soy la persona ideal para tu padre Hem, pero trato de esforzarme para dar todo por esta familia aunque a veces siento que no es suficiente, no quiero ser una intrusa en tu vida ni tampoco que me tomes como un reemplazo de tu mamá, soy tu amiga. Quiero ser tu amiga".

Hice una mueca recordando las palabras de Pierre, sobre lo perra que era yo con ella. Las muecas de George, que aunque no estaba de acuerdo con mi actitud no mencionaba nada y se guardaba sus comentarios. Los reproches de Toto y las incontables discusiones que tuvimos cuando ella se mudo aquí, cuando ella la reemplazo aunque sabia que no era verdad. Susie no reemplazo a nadie, porque no había nadie para ser reemplazado, mamá huyo. Dejo libre su lugar, lo regalo, no peleo por él porque no le importaba, decía que el amor se acababa y que el de ella por Toto no estaba más y jamás llegue a saber si era verdad o mentira, sin embargo la rubia lo ha hecho desde que llego aquí, reclamo lo suyo, amo a Toto desde el minuto uno, ama a Jack y me ama a mi, lo ha hecho desde hace casi cinco años, con uñas y con dientes aferrándose a lo que le corresponde, sostuvo a esta pequeña familia en el peor momento y yo no tenia porque seguir entrometiéndome en eso.

No cuando ella era lo mejor para estar en equilibrio. Para todos.

Mamá opto por el camino fácil, el camino de ya viví suficiente y no planeo ingerir alguna medicina en mi vida, fue egoísta y yo lo estaba haciendo ahora con Susie.

"Susie tu eres la mejor persona para Toto, eres linda, eres divertida, eres amable con el, no le causas problemas ni te interpones ante sus locas ideas, al contrario lo apoyas y siempre estás ahí para el". Siempre estás ahí para todos. "Ambos son tranquilos y su relación es envidiable". Alzo las cejas haciéndome reír, vacié la harina en el pequeño bowl de cristal para empezar a mezclar los ingredientes. "Se lo de envidiable porque escucho los chismes del paddock".

"Gracias Hem".

"¿Por qué?". La mire expectante ante su agradecimientos, sus ojos azules se entrecerraron en mi dirección y sonreí cuando saco los moldes circulares para hacer cupcakes.