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First love.
Un sonido conocido llamaba a tus sentidos haciendo que tus articulaciones y musculos comenzaran a estirarse. Abriste los ojos lo suficiente cómo para notar algo de claridad por la ventana.
Estaba oscuro, un leve viento soplaba fuera de la casa y la lluvia caía torrencialmente por el vidrio.
Una melodía angelical y un exquisito olor a tostadas y café aparecieron por la puerta media abierta, terminando de despertar tus sentidos que se pusieron en alerta cuándo tu vientre rugió.
Quitaste las sabanas de tu cuerpo, poniéndote una campera por tu cuerpo y tus medias largas, para caminar lentamente tallando tus ojos hasta la cocina.
Tu mejor amigo, uh ¿mejor amigo? estaba allí. Un leve color en tus mejillas apareció recordando lo que habia pasado la noche anterior.
Aún podías recordar sus labios sobre los tuyos, las confesiones nerviosas de ambos y las caricias, que ahora tenían otro sentido, en tu cuerpo.
¿Realmente había pasado? ¿O era parte de tu fantasía?
Renjun se había convertido tu mejor amigos desde que ambos habían comenzado la universidad, uniendolos el amor por la musica.
Todas esas letras de amor que habías escrito, junto con tu piano sagrado, siendo cantadas a la perfección por Renjun, haciendote caer cada día más por él.
¿Realmente lo habías hecho? ¿Confesarte a él usando unas de tus letras?¿Diciendole que escribías pensando en él?
Un escalofrío recorrió tu cuerpo desde la punta de los pies hasta tu cuello, haciéndote temblar.
—¿Que haces ahí?—su voz te interrumpió.
Renjun te miraba con una sonrisa cómplice. Debiste hacerte visto patética, ahí parada, mirándolo, en shock sin responder por los nervios.
—Ah~ yo..—intentabas comenzar pero no podías, tus orejas ardiendo por la vergüenza.
Él chico somnoliento se acercó hasta a ti, tomando tu mano y llevándote hasta la mesa, haciéndote tomar asiento.
