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Caminando con cuatro ojos y siendo cauto de no tener que volver a ver a aquel chico alto de tes pálida, Jeongin logró llegar a la cafetería de su universidad aquella tarde de martes de primavera, no sintiéndose del todo confiado para poder beber su café en el lugar, por temor a topárselo.

Luego de haber hablado con él en el aula de plástica aquel día, Yang había oído que lo llamaban desde distintos lados mientras se movía por la facultad, pero nunca se había tomado el atrevimiento de revisar de quién se trataba por temor a que fuera el mismo chico.

Era extraño para él, dado que nunca nadie se le había confesado. Aunque el menor no creía que eso era una confesión real; le parecía más una especie de broma barata.

Como introvertido que era, no tenía amigos en sus clases. No era que los necesitara, más por ese justo motivo le sonaba raro que alguien tuviera interés en él. Especialmente si se ponía a analizar a el peli negro en sí.

Hyunjin era totalmente estético y bonito. Y como tal, debía estar con alguien de su tipo.

Por esas razones, Jeongin no tenía ganas de siquiera conocerlo. Creía que a la larga, no valdría la pena.

Entre pensamientos y más pensamientos, no obstante, no se dio cuenta de que Hwang estaba a pocos metros de él, y que este se le aproximaba con entusiasmo. Sin embargo, una chica lo frenó al mismo antes de que pudiera llegar a su destino. De todas maneras, quedó lo suficientemente cerca como para que Jeongin escuchara la conversación entre ambos.

"Hyunjin... Podemos hablar a solas?" la niña bajita preguntó con timidez y una media sonrisa en su boca, queriendo lucir linda. 

"Ahora estoy apurado. Hablemos más—"

"Hyunjin!" lo interrumpió, alzando un poco su voz, haciendo que las personas alrededor la miraran brevemente, incluyendo Jeongin. "Hyunjin... Tú me gustas... Así que... por favor podrías considerar salir conmigo?" la chica fue directo al grano, y sólo entonces Hwang bajó sus ojos a ella, sonriéndole con simpatía, dándole a entender brevemente que quizás si estaba interesado.

El corazón de Jeongin latio un poquito más rápido sin darse cuenta.

"No. No me gustas las chicas, lo siento." respondió sincero, como solía hacerlo, y Yang no pudo evitar fruncir el ceño por el poco tacto que había tenido al hablar. 

De todas maneras, la desconocida no se rindió y optó por tomarlo del brazo, frenando su caminar.

"Por favor, Hyunjin! Tan solo dime... Tienes a otra, no es así?" Insistió, empezando a armar un pequeño escándolo que, como era de esperarse, hizo que el peli negro suspirara riendo. "Por qué no puedes ser honesto y ya?"

"Bueno... En ese caso te diré que no me gustan las chicas. Pero si me gustasen, no saldría contigo jamás. Eres demasiado densa." Hyunjin habló en voz alta, y todo el comedor se calló al oírlo.

Posteriormente, la chica salió corriendo, sintiéndose sumamente humillada y herida, pero él continuó con su caminata hacia Jeongin.

Para su mala suerte, este se escapó al mismo tiempo que la desconocida, realmente no queriendo tener que conversar con alguien tan sin vergüenza como él.

Jeongin pensó en Hyunjin como alguien sumamente descarado y sin tacto. Eso lo intimidó un poco.

En realidad, bastante.

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𝐒𝐈𝐍𝐂𝐄𝐑𝐎 | 𝐡𝐲𝐮𝐧𝐢𝐧 ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora