La felicidad

PARTE 12: Carta

Ryu y yo estamos en una relación, y espero que todos lo acepten". La mente de Hestia estaba dando vueltas ante esta declaración de su capitán. En unos momentos, se desmayó pensando en su premonición y esperando que no fuera cierto.

"¿Diosa?" Preguntó Bell al darse cuenta de que Hestia se tambaleaba de un lado a otro. "¡Diosa!" Gritó cuando Hestia cayó al suelo, casi como si fuera noqueada por una fuerza invisible. Corriendo a su lado, se dio cuenta de que ella simplemente se había desmayado. Tomando una respiración profunda con alivio "Se acaba de desmayar, no esperaba eso. La voy a llevar a su habitación".

Levantándola y mirando a todos los que parecían sorprendidos con los ojos muy abiertos. Todos comentando algo a base de conmoción o sorpresa.

Cuando comenzó a irse hacia las escaleras, Ryu comenzó a seguirlo antes de volverse hacia el resto de la familia, "Lamento los problemas que ha causado esta noticia. Aún espero que todos puedan aceptar esto". Había esperado que su propio nerviosismo no se revelara mientras hablaba, no fue del todo exitosa.

El hermano mayor del grupo habló primero. "Mientras los dos estén felices, no veo ningún problema con esto. Quiero decir, después de todo, puedo dormir con casi cualquier cosa". Dando un pequeño guiño y empujando al elfo ahora completamente avergonzado. Mikoto solo asintió con la cabeza, pero se sonrojó levemente por el significado de la última parte.

"No estoy feliz por eso…" dijo Lili pesadamente, abandonando su actitud juguetona. Con todos los ojos puestos en ella, "Pero no estaré en desacuerdo con eso. Si eres el elegido por el Maestro Bell, que así sea".

Ryu sintió que su nerviosismo se desvanecía mientras todos hablaban, miró a su alrededor y vio a Haruhime. El arrepentimiento llenó su corazón cuando vio que el Renard parecía al borde de las lágrimas. ' Lo siento Haruhime, sé cómo te sentiste y aún así decidí seguir adelante. Espero puedas perdonarme. Pero esa preocupación pronto se desvaneció cuando una sonrisa generosa pronto llenó su rostro.

"Te deseo lo mejor, Ryu-sama. Me alegro de que te eligiera antes que Aiz." Varias cabezas asintieron. "Ahora, ¿por qué no vas con Bell? Espero que ambos puedan hablar con Lady Hestia en privado y ayudarla a entender."

Secando una lágrima que comenzó a formarse en su ojo, "Gracias a todos por aceptarme. Creo que debería hacer eso". Dándose la espalda para seguir a Bell, nunca vio las diversas sonrisas que llenaban los rostros de la familia.

La noche había comenzado a caer cuando Hestia salió de su sueño. Bell y Ryu se habían quedado con la Diosa del Hogar durante todo el día. "¡Diosa!" Bell gritó cuando se dio cuenta de que Hestia estaba empezando a despertar.

"Oh Bell." Dijo con cansancio al ver el cabello blanco como la nieve de su capitán. Luego vio al elfo, cuyo cabello que una vez había sido teñido había comenzado a desvanecerse a su color natural, en algún lugar entre el verde y el rubio dorado. Sus ojos se abrieron de golpe en el sitio del elfo. "Aquí estaba esperando que fuera un sueño. Supongo que no. Ustedes dos están en una relación, ¿correcto?"

Para sorpresa de Hestia, en realidad fue Ryu quien habló primero. "Lo estamos. Espero que puedas, en tu corazón, aceptar eso. Sé que esto está saliendo de la nada".

"Te sorprendería lo no sorprendido que estoy. Estoy un poco enojado, pero lo vi venir. La forma en que Bell había hablado de ti después de lo que sucedió durante la expedición, me lo hizo evidente". Volviéndose hacia Bell, miró profundamente a sus ojos rubí. "Por eso al principio dudé en aceptar tu propuesta de invitarla a unirse a la familia ..." La mirada de sorpresa en el rostro del joven capitán le rompió el corazón un poco. "Pero estoy contento, contento de que sea alguien que creo que al menos será parte de nuestra familia. No de Loki." Su significado era tan sutil como un ladrillo a través de una ventana.